El beneficio de la siderúrgica se desploma un 65% por la caída del precio del acero
N. A. E.
GIJÓN.
Viernes, 10 de mayo 2019, 03:27
Tres días después de anunciar un recorte de la producción de 3,2 millones de toneladas en Europa por sus malas previsiones para 2019, Arcelor presentó ayer sus resultados del primer trimestre y, aunque sigue registrando importantes beneficios, unos 370 millones de euros (414 de dólares), estos caen un 65% en relación al mismo periodo de 2018, un ejercicio especialmente positivo para la multinacional. Entre enero y marzo del año pasado, el grupo había registrado un beneficio neto de 1.064 millones de euros (1.192 de dólares), pero factores como el alza del coste del CO2, el incremento de importaciones de acero extracomunitario y la desaceleración de la economía han lastrado sus cuentas.
«La rentabilidad se ha visto impactada por los precios más bajos del acero debido a la actividad económica más débil y el continuado exceso de capacidad a nivel mundial, así como por el aumento de los costes de las materias primas», aseguró el presidente y máximo accionista de la compañía, Lakshmi Mittal.
En la presentación de sus resultados, la empresa vuelve a insistir en los mismos argumentos que le han llevado a reducir su producción en las plantas asturianas para «adaptarse al actual entorno de mercado». Censura los altos niveles de importación de acero y critica las medidas de salvaguarda comercial impuestas por la Comisión, que considera que «no han sido totalmente efectivas».
En este sentido, Mittal volvió a reclamar un arancel ambiental para los productores de países extracomunitarios que no tienen que hacer frente al mercado de derechos de emisión, que suponen, según fuentes del grupo, un sobrecoste de alrededor de 45 euros por tonelada para los productos que salen de las factorías asturianas. «Es importante que haya igualdad de condiciones para atajar la competencia desleal, y esto incluye un ajuste en la frontera para asegurar que las importaciones hacia Europa afrontan los mismos precios del carbono que los productores en Europa», insistió el máximo accionista.
Más allá del desplome de los beneficios, el resultado bruto de explotación (ebitda) entre enero y marzo fue de 1.475 millones de euros, un 34,2% inferior al registrado en el mismo periodo de 2018 y un 15,3% menor que en el trimestre precedente.
La facturación, sin embargo, fue similar a la de hace un año, se situó en 17.143 millones de euros (19.200 de dólares), gracias a que el incremento de las ventas de acero (las expediciones crecieron un 2,2%, sobre todo por el alza en Europa, un 8%) y del precio del mineral de hierro (10%) compensaron la caída de los precios siderúrgicos (-3,1%).
Las previsiones empeoran. Arcelor prevé que la demanda en Europa se contraiga un 1% este año, frente al aumento del 1% que esperaba, y que en todo el mundo crezca entre un 1% y un 2%, por debajo del aumento de hasta el 3% que calculaba antes.