Retrasos de varios años en las ayudas a los coches eléctricos obligan al Principado a reforzar personal
El Ejecutivo regional justifica las demoras por el modelo de concurrencia simple y el solapamiento de los planes Moves II y III
La compleja ejecución del plan Moves –el programa del Gobierno de España destinado a fomentar la movilidad eléctrica y sostenible– ha provocado retrasos de ... hasta varios años a la hora de recibir las ayudas correspondientes para la adquisición de este tipo de vehículos. Aunque se trata de una iniciativa nacional, la gestión recae sobre las comunidades autónomas y muchas de ellas afrontan dificultades para gestionar los pagos, como es el caso de Asturias. Son numerosos los compradores de estos vehículos en la región que siguen a la espera del abono de estas ayudas y, precisamente por eso, desde el Principado aseguran que «se está trabajando para realizar un refuerzo adicional del personal para trabajar tanto en las concesiones como en los pagos del plan Moves III». La previsión que maneja la Dirección General de Energía y Minería es que ese refuerzo –que se sumaría al que ya se hizo en febrero– esté ya operativo este mismo mes.
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En paralelo, explican desde el Ejecutivo autonómico que los presupuestos de Asturias para 2025 permiten «agilizar la autorización de las modificaciones presupuestarias necesarias, permitiendo que se hagan con autorización del consejero por razón de la materia, dando cuenta al Consejo de Gobierno en el plazo de un mes desde su autorización».
Entre los motivos con los que el Principado justifica estos retrasos se encuentra, por ejemplo, el solapamiento del Moves II y el III, que generó «importantes costes administrativos de tramitación perdida», debido a las renuncias a subvenciones ya concedidas para poder optar a unas más favorables en el nuevo programa. Por otro lado, el Moves III fue una de los primeras líneas del Mecanismo de Recuperación y Resiliencia en lanzarse en Asturias, lo que derivó en que «posteriores modificaciones normativas afectasen sustancialmente a los requisitos documentales exigibles».
Método de concesión
Esta circunstancia provocó «que tanto la convocatoria ya publicada en el Boletín Oficial del Principado de Asturias (BOPA) como todas las solicitudes recibidas debieron reformularse para cumplir estos nuevos requisitos, generando evidentes retrasos». Además, el sistema de concesión es el denominado como concurrencia simple, en el que las solicitudes deben atenderse por riguroso orden de entrada. Una petición que no atienda a los requerimientos lleva a la necesidad de la publicación adicional de estos en el BOPA, lo que provoca un retraso a todas las que la sigan en fecha, sostienen desde el Ejecutivo regional. Es decir, si de cien solicitudes las número 20, 33 y 80 están mal presentadas, no se puede resolver ninguna hasta que se subsanen primero las que contienen errores.
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Además, inciden en que en Asturias se optó, siguiendo el criterio de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), «por que las ayudas solo pudieran solicitarlas particulares, frente a otras comunidades autónomas que cuentan con entidades colaboradoras como pueden ser los concesionarios». Es decir, «todo el peso en la recepción y la tramitación» de los más de 4.734 expedientes presentados desde agosto de 2021 hasta cierre del año pasado recayó directamente en la consejería (antes de Transición Ecológica, ahora de Ciencia).
Del total de solicitudes recibidas, 2.963 corresponden a vehículos. Actualmente, hay cuatro resoluciones publicadas con las peticiones presentadas hasta el 31 de julio de 2022 (con 858 expedientes) y por un importe de 4,09 millones de euros. Además, apuntan desde la Dirección General de Energía y Minería, se está preparando una quinta resolución de concesión con las solicitudes que llegaron hasta el 31 de diciembre de 2022; son 301 y suponen subvenciones de 1,1 millones. Por otro lado, añaden que se están revisando 221 expedientes hasta abril de 2023, por 500.000 euros.
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Puntos de recarga
Las otras 1.771 solicitudes corresponden a los puntos de recarga. Hay cuatro resoluciones publicadas con las presentadas hasta el 31 de mayo de 2022 (355 expedientes), con un importe de ayuda concedida de 3,03 millones. Al igual que en el caso de los vehículos, se está preparando una quinta resolución de concesión con las solicitudes existentes hasta cierre de 2022 (218 expedientes), con una subvención que alcanza los 811.320 euros; son 218 expedientes u el importe asciende a 811.320 euros. Además, se están revisando 139 expedientes hasta abril de 2023 por 250.000 euros.
Manuel Fernández, vicepresidente de Aspa –la patronal asturiana del automóvil–, reconoce que esta situación «puede afectar» a las ventas de vehículos eléctricos porque «las ayudas, de momento, no están llegando». Al mismo tiempo, apunta a la ausencia de una infraestructura de recarga extendida como uno de los motivos por los que el coche electrificado no acaba de despegar: «La gente no se decide por el vehículo eléctrico. Hay unas dudas muy razonables porque no hay una red de recarga clara en las ciudades, en las comunidades de vecinos ni en trayectos largos, por eso el vehículo de combustión sigue siendo el preferido y el híbrido crece más que el eléctrico».
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