Los sindicatos acusan a la patronal de dilatar el diálogo de la concertación

CC OO y UGT acusaron ayer a la patronal asturiana de «dilatar» el proceso de negociación del nuevo acuerdo de concertación social que, ya por sí mismo, llegará más tarde que nunca. Los sindicatos renovaron su apuesta por el diálogo, aunque reprocharon que «los hay que tienen menos prisa» por alcanzar un pacto, cuando «la prisa la marcan las necesidades de muchos». Los secretarios generales de ambas centrales, Antonio Pino y Justo Rodríguez Braga, recordaron que el anterior acuerdo se firmó un 4 de febrero, la misma fecha en la que este año se inició el proceso de negociación con las primeras reuniones de las mesas sectoriales. Por esta razón, han propuesto establecer un plazo «razonable» y aproximado de seis semanas para cerrar el acuerdo. «Si hay una apuesta clara por la concertación, se hace camino al andar», incidieron.

Ambos líderes atribuyeron el retraso que está sufriendo el proceso a los cambios y reajustes internos de la Federación Asturiana de Empresarios (Fade). «Personas que no estaban» en las negociaciones previas, apuntó Rodríguez Braga, «están haciendo planteamientos que pueden dilatar» el diálogo. Otro motivo de desajuste, completó el secretario general de UGT, podría ser el incumplimiento de las inversiones firmadas en la anterior concertación, «que es posible que esté jugando un papel no lubricante». Aún respaldando a la patronal en la necesidad de que el Gobierno regional cumpla con lo pactado en su totalidad -de los 300 millones de inversión planteados en el presupuesto solo se ejecutaron 84 millones en 2014-, destacó que la prioridad para los sindicatos, en tiempos de escasez, «siempre serán las personas».

Por esa razón, Pino apeló a la «responsabilidad social» de los empresarios e instó a Fade a ir «más allá» de los intereses de sus representados para «pensar en la región».

Del mismo modo, definió como «incuestionable» el salario social, aunque reconoció la necesidad de «una mejor gestión» del mismo y de la búsqueda de soluciones para reinsertar a sus beneficiarios. En este sentido, confió en que el sector privado se implique en las políticas de empleo. «Queremos que se impulsen los acuerdos bilaterales entre empresas y sindicatos», aseguró, para tratar las relaciones laborales y la negociación colectiva, además de la participación institucional de los agentes sociales, «que no puede estar a merced del Gobierno de turno».

CC OO y UGT insistieron en que la concertación «es el acuerdo de un todo que hay que cerrar para cuatro años y, luego, iremos desarrollando año a año. Si no hay presupuestos, tendremos que aprobar créditos extraordinarios».