«La disculpa de la tarifa eléctrica no es suficiente porque esta empresa ha tenido ayudas»

Avilés volverá a cerrar filas en defensa de la continuidad de Alcoa en la ciudad, tal y como sucedió hace cuatro años, cuando el primer amago de la multinacional acabó con un masivo movimiento de rechazo en la calle. Así lo anunció ayer la alcaldesa, Mariví Monteserín, en una comparecencia de urgencia tras confirmarse los planes de la empresa. En un tono que evidenciaba un profundo malestar con la multinacional, la regidora les envió a sus directivos una advertencia: «No nos sirve ninguna otra cosa que no sea la continuidad de la actividad industrial de Alcoa en nuestra comarca».

A partir de esa exigencia, aseguró que «vamos a agotar toda nuestra capacidad para revertir las intenciones de la empresa, no solo desde el ámbito de los trabajadores, de la alcaldesa o del pleno municipal, sino también estrechamente junto a los gobiernos del Principado y de España».

La alcaldesa rechaza la tarifa eléctrica como la causa principal del anuncio de cierre de Alcoa. «Conocemos a esta empresa y sabemos como funciona. Tenemos un problema que es común en la comarca de España con las tres industrias electrointensivas más grandes de España. Siempre lo dije, nos va la vida en arreglarlo. Pero este caso no tiene que ver solo con eso, esta empresa ha tenido ayudas», defendió. Por tanto, esa disculpa para Mariví Monteserín «no vale, no es suficiente», motivo que le lleva a pensar que «por eso estamos en fase de exigir».

En cuanto a la actitud de la multinacional cuatro años después del anterior anuncio de cierre, a la alcaldesa de Avilés no le han gustado «ni el fondo ni las formas. Hasta este momento -ayer al mediodía- he podido hablar con todos los actores, menos con la empresa».

Monteserín suspendió toda su agenda prevista en la tarde de ayer, que incluía varios actos relacionados con los Premios Princesa de Asturias, para reunirse de urgencia con los sindicatos de Alcoa y convocar una junta de portavoces.

En el encuentro con el comité de empresa de la multinacional se decidió unidad de acción en todas las medidas que se adopten a partir de ahora. La alcaldesa les transmitió su apoyo y les informó de las gestiones junto al gobierno regional y central. Los representantes sindicales aguardarán a la decisión que tome hoy jueves el pleno del comité de empresa acerca de los pasos a seguir, tanto en la negociación con la dirección de Alcoa como en posibles movilizaciones.

«Este órdago no lo queremos, se lo devolvemos a la empresa y según actúe ella, nosotros actuaremos en consecuencia, junto con los ciudadanos, en Madrid, en Bruselas, o donde haga falta», aventuró ayer en el Ayuntamiento Juanjo Estrada, secretario general de la Federación de Industria de USO, sindicato al que le corresponde la presidencia rotatoria del comité de empresa.

Tras la reunión con los sindicatos, la alcaldesa de Avilés convocó una junta de portavoces en la que se acordó la convocatoria de un pleno extraordinario que se celebrará mañana viernes. Además, a lo largo del día de ayer todos los grupos de la oposición municipal expresaron su apoyo a la continuidad de Alcoa en la comarca y cargaron contra la inestabilidad de la política del gobierno central para alcanzar un acuerdo sobre la tarifa eléctrica que afecta a la industria electrointensiva.

Izquierda Unida y Podemos expresaron de forma conjunta su apoyo a los trabajadores y a sus familias y defendieron la importancia de Alcoa «como uno de los centros y corazones industriales y de mantenimiento de empleo en nuestra comarca, por lo que no estamos dispuestos a consentir su cierre». También instan a la alcaldesa, así como al Principado y al Estado, «a que trabajen encarecidamente para crear las condiciones necesarias para garantizar la continuidad de Alcoa».

Ciudadanos advirtió de que «esto es un aviso a navegantes de por dónde van los tiros, y de que es urgente una política industrial regional clara y un contexto nacional que nos permita competir y trabajar en igualdad de condiciones con otras regiones de España y del Mundo».

Los concejales no adscritos de UCIN también piden al gobierno de España y al Principado «medidas tendentes al mantenimiento de los puestos de trabajo y de la actividad industrial en nuestra ciudad, poniéndonos a disposición de todas las administraciones en cuantas medidas sean necesarias, sin descartar que el Estado retome esta actividad en un sector industrial que consideramos de alto valor estratégico». En esta misma línea se expresó ayer Ganemos, que defendió la «nacionalización» de la planta de Alcoa. «La privatización fue subvencionada en sus costes eléctricos durante 25 años, y la finalización de esta subvención, con completa deslealtad de la empresa privada es la única razón del cierre. El Estado no puede hacer dejación de su responsabilidad, tanto en la privatización subvencionada, como en la desindustrialización del país», aseguró Agustín Sánchez.

Síguenos en: