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LAURA CASTRO
GIJÓN.
Sábado, 29 de diciembre 2018, 04:27
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Las comarcas mineras tendrán «oportunidades» de futuro una vez finalice el proceso de la descarbonización. Es el compromiso que reiteró ayer el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en su última rueda de prensa del año. Asegura que el proceso impulsado por la ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, traerá prosperidad a todas las zonas afectadas, entre ellas las cuencas mineras asturianas. «Hemos apostado porque sea justa sentando las bases de un futuro próspero», incidió Sánchez.
No hizo una referencia expresa a Asturias ni tampoco a Aragón y Castilla y León, las regiones más afectadas por el cierre de las minas de carbón y de las centrales térmicas. Sin embargo, estaba claro a quién iba destinado su mensaje. Especialmente cuando habló del compromiso de «no olvidarse» de las comarcas afectadas. Al contrario, dijo, «este Gobierno quiere darles y crear oportunidades».
Durante su intervención acerca de la transición ecológica en España, Sánchez incidió también en el impulso que le ha dado el Ejecutivo central «al autoconsumo y la eliminación del impuesto al sol».
Sus palabras llegaron el mismo día en el que los más de 400 mineros de los pozos Carrio y Santiago, yacimientos de Laviana y Aller, ponían fin a a la actividad extractiva. Asturias experimenta ya el impacto de la transición energética, que ya sufren, de hecho, sus industrias. La primera de ellas Alcoa, que ya inició el proceso de cierre de su planta de Avilés y también de La Coruña, entre otras cosas por el elevado precio de la energía y la incertidumbre respecto a su futuro sin el carbón entre las fuentes generadoras de energía. Arcelor ya ha puesto en marcha una regulación temporal de empleo a más de 1.600 trabajadores para reducir costes fijos y Asturiana de Zinc también mostró su preocupación por la tarifa eléctrica.
Este panorama llevó al presidente del Principado, Javier Fernández, a expresar su «preocupación» el pasado miércoles en la reunión con la ministra Teresa Ribera y con los dirigentes autonómicos de Aragón, Javier Lambán, y de Castilla y León, Juan Vicente Herrera. «Sabemos que hay una realidad que va a llegar, pero debemos construir lo que pensamos sin colapsar de inmediato la que ya existe», consideró Fernández tras dicha reunión y advirtió que la transición energética «necesita una atención especial», sobre todo en las regiones afectadas.
Los tres presidentes ya reclamaron a Ribera el miércoles que prolongue la vida de las centrales térmicas más allá del 2020, pues consideran que de no hacerlo, el precio de la energía se elevará. El secretario de Estado de Energía, José Domínguez Abascal, recordó que no es el ministerio el que «impone» los plazos, pero aseguró que «habrá centrales de carbón después de 2020».
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