Podemos excluye a Jorge Fernández, que amenaza con recurrir a los tribunales

La dirección de Podemos no registró la lista hasta pasadas las diez de la noche, apurando al máximo el plazo establecido y generando tensión entre el sector crítico, que se concentraba desde las seis de la tarde a las puertas de los juzgados como medida de presión. Temieron la posibilidad de que Podemos optara por no registrar la lista o que llegase tarde, como ocurrió en los comicios andaluces. Además, tal y como venían quejándose en los últimos días, como no se ha resuelto aún la propuesta de sanción que pesa sobre la propia cabeza de cartel, Covadonga Tomé, el sector crítico llegó a dudar de que una decisión de último momento pudiera dejarla también fuera de la lista. No fue así y la dirección del partido la registró según había anunciado, si bien acusó a los críticos de hacer un escrache contra las trabajadoras que acudieron a la Junta Electoral.

El equipo de Covadonga Tomé cree que Podemos ha salido «debilitado» al considerar que no se ha respetado la voluntad de la militancia y será hoy cuando decidan qué medidas adoptarán una vez que se ha confimado que Fernández no irá en la candidatura. No obstante, ayer rechazaban abandonar la formación. «Entiendo que a Rafael Palacios le gustaría quedarse solo en el partido, pero lo siento Rafa, eso no va a ocurrir», declaró Fernández, quien no descarta, eso sí, adoptar acciones legales ya que asegura que cuenta con un informe jurídico que defiende que su sanción no le impide ser candidato de Podemos. En su opinión fue solo una excusa para apartarle de la lista y «buscar acomodo» a la portavoz de la formación, Ana Taboada.

Podemos no fue el único partido que apuró al máximo el plazo para registrar la convocatoria. También en las últimas horas lo hizo IU después de que el exconcejal avilesino Fernando Díaz Rañón y los otros cuatro candidatos afines a su sector renunciaran a formar parte de la candidatura IU-Convocatoria por Asturias tras verse desplazados por Más País, con Xabel Vegas como número 3, y por la diputada de Podemos, Nuria Rodríguez, en calidad de independiente. Los críticos reprochan a Ovidio Zapico que no debatiera esos cambios en los órganos del partido y, como consecuencia de su baja, la coalición tuvo que buscar sustitutos contra reloj.