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J. M. PUGA
OVIEDO.
Martes, 2 de octubre 2018, 03:30
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Ahora que octubre marca el inicio de una nueva cosecha de manzana, toca despedir la de 2017, al menos, de la primera línea de acción. Los productores impulsores de la marca 'Sidra Seleccionada', incluida ya en la Denominación de Origen Sidra de Asturias, prestaron ayer sus últimos trece toneles de la temporada a la opinión de un jurado experto.
Alterna Sidrería Oviedo albergó esta última cata, la cuarta del año, tras la que se hicieron públicos los resultados de la campaña. De los 3.100.000 litros de sidra propuestos a examen por los lagares Trabanco, Foncueva, Muñiz y Peñón, 1.400.000 podrán lucir en su botella la etiqueta especial que la diferencia como 'Sidra Seleccionada'. Curiosamente, esa cantidad se la reparten entre los tres primeros productores citados.
La responsabilidad de juzgar la especial calidad del caldo patrio la tuvo un jurado experto, compuesto por Severino Cueva, Joaquín Fernández, Mino Villarrica, Guti Rodríguez, Joaquín Cernuda y Sindo Martínez. El color y el sabor fueron solo dos de las características que tuvieron que valorar. Ellos solo veían botellas. El único que sabía a qué productor pertenecía cada una era Sabino Pérez Presa, el encargado de escanciarla y servirla a los presentes.
La cata celebrada en la tarde de ayer tuvo dos peculiaridades. La primera, que el jurado experto estuvo acompañado por los que podrían ser su relevo generacional. La segunda, que por primera vez hubo mujeres en el amateur: María José Hevia y Sonia Diego. Con ellas, estuvieron Fran Pola, Juan Pérez, Rafael Cernuda y el estadounidense Ryan Burke.
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