Borrar
SUPERFICIE. Vista de las baldosas flotantes que recubren el parque Naranjo del Bulnes. / PAÑEDA
La segunda reforma del parque Naranjo de Bulnes comenzará tras el verano
GIJÓN

La segunda reforma del parque Naranjo de Bulnes comenzará tras el verano

Los vecinos de Nuevo Gijón demandan cambiar el pavimento actual para evitar más accidentes con las baldosas rotas

EVA L. MACHADO

Martes, 7 de agosto 2007, 03:44

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

Tras más de un año de reclamaciones, los vecinos de Nuevo Gijón verán cómo el parque del Naranjo de Bulnes es renovado. Todavía no hay una fecha concreta para que comiencen las obras. «La idea es que se inicien en setiembre, aunque es pronto para decir un día concreto, antes quiero reunirme con los responsables de las obras», comentó ayer Francisco Santianes, concejal de Vivienda y delegado del gobierno municipal en el barrio.

Es la segunda rehabilitación del parque, que se asienta sobre un aparcamiento privado. «La anterior fue motivada por las humedades que se presentaban en el parking que hay debajo», explicó Santianes. Esta vez será necesario verificar las columnas y los laterales de la estructura, ya que soportan mucho peso.

Sin embargo, la principal reclamación por parte de los vecinos es que se cambie el pavimento, que en la actualidad está formado por baldosas flotantes, que cada vez que se parten provocan situaciones de peligro. «Ya era hora de que lo arreglaran. Muchas están levantadas y ya se han puesto numerosas denuncias al Ayuntamiento por parte de personas que se han caído», señaló ayer Elena Delgado, presidenta de la asociación vecinal Santiago. Y añadió: «Primero prohibieron jugar a la pelota y los patines, para evitar que se levantaran o se rompieran las baldosas». Según Delgado, la única solución para que no se produzcan accidentes sería «cerrar los accesos al público, pero si esto hubiera ocurrido los vecinos se hubieran movilizado».

No sería la primera vez que los afectados se manifiestan por conseguir un parque en buen estado. En marzo del año pasado los vecinos se reunieron en esta zona bajo el grito: «¿Queremos un parque nuevo!», e iniciaron una campaña de firmas para llamar la atención del Consistorio. Incluso amenazaron con «cerrar el tráfico con las baldosas desprendidas». «Me alegro que todo se haya solucionado sin tener que recurrir a cortes de carretera, estas cosas es mejor evitarlas», apuntó la presidenta vecinal.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios