Borrar
CRÍTICA DE TV

Unánime

JOSÉ JAVIER ESPARZA

Lunes, 12 de noviembre 2007, 02:06

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

FUE la imagen más vista del sábado en todos los canales y será la imagen de mes, si no del año, porque ya se está viendo en infinitas web: el Rey que abronca a Hugo Chávez, «¿Por qué no te callas?», y después el Rey que planta a Ortega y se marcha de la Cumbre Iberoamericana. Desde el mariñesco «que te calles, Karmele» no se había oído una conminación al silencio con más posibilidades de convertirse en giro común de la lengua popular. Decía el viejo maestro que los grandes acontecimientos admiten, por definición, un solo titular: «Franco ha muerto», «Felipe presidente», «Alonso campeón»; «¿Por qué no te callas?». Era lógico, pues, que en el titular coincidieran todos los canales de televisión a la hora de dar la noticia. Lo que pasa es que coincidieron en eso y también en todo lo demás. En estas situaciones es cuando se hace patente la pasmosa unanimidad de las cadenas españolas, su homogeneidad de plomo, que no concierne tanto al enfoque editorial -aunque también- como a la manera de hacer información, de contar las cosas. Lo del sábado noche era digno de verse: en todas las cadenas, una periodista -porque todas eran mujeres-, situadas todas en idéntico espacio, con el mismo paisaje detrás, sujetando todas el micrófono de la misma manera y contando la misma historia; cualquiera diría que eran todas la misma periodista que cambiaba de peluca para hablar en según qué cadena.

Todas las cadenas contaron también el regio plante ante la intervención del sandinista Ortega, y todas las cariátides del idéntico micrófono coincidieron -faltaría más- en dar la misma versión: la decisión del Rey de abandonar la cumbre había sido consensuada con Zapatero. La verdad es que debieron de consensuarla por telepatía, porque basta ver el vídeo para constatar que fue un gesto espontáneo y, por tanto, ajeno a consenso alguno. Acto seguido, la enviada especial de Antena 3, Cristina de Juan, aclaraba las cosas: señalaba que eso del consenso era la versión del Gobierno español. Deducción del espectador: o sea, que todos repiten la información que les da el Gobierno, y de ahí la coincidencia. Bueno, pero, entonces, ¿en qué ha quedado exactamente el trabajo de los periodistas de la tele? ¿En el de simples lectores de las notas de prensa oficiales? Aún no hace muchos años se premiaba al periodista espabilado que metía la cuchara en los corrillos y estaba en condiciones de aportar algo original: «Sabemos de buena fuente que ». Pero ahora Buenafuente es un programa humorístico de medianoche. Al cual, por cierto, también va a acudir el presidente del Gobierno.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios