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ANÁLISIS SOBRE EL INICIO DE TEMPORADA. El entrenador del Sporting, Manuel Preciado, habla con el presentador del programa 'Juego Limpio', Jaime Ceñal, durante un momento de la entrevista emitida en Punto Radio Asturias. / JESÚS DÍAZ
«Hidalgo me gusta, me gusta mucho»
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«Hidalgo me gusta, me gusta mucho»

Manuel Preciado reconoce que el colombiano es un delantero «joven, rápido y bueno tácticamente» Alfredo García Amado rubricó ayer en Venezuela el principio de acuerdo para su cesión al Sporting

JAVIER BARRIO

Martes, 13 de noviembre 2007, 19:16

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Nadie que le conozca le puede calificar como una persona a la que le gusten los rodeos. Preciado descubrió ayer, por completo, el as que guardaba en la manga. EL COMERCIO ya lo había desvelado hace unos días y él no rehuyó la pregunta. Fue concreto. Directo. Sincero. Transparente. Fiel a su estilo. El cántabro expuso su opinión sobre Carlos Hidalgo, el delantero que, si las negociaciones no se tuercen, llegará a Gijón el próximo mes de diciembre. «Es un jugador joven, rápido, con toque y bueno tácticamente. Sus características me agradan», afirmó Preciado en una entrevista concedida a Punto Radio Asturias, en el programa 'Juego Limpio'.

Manuel Preciado fue muy explícito. No se anduvo por las ramas para explicar las primeras impresiones que le ha transmitido el máximo goleador de la Liga colombiana. Le gusta lo que ha visto y ha bendecido su llegada. Está conforme con la operación. Pese a que no ha podido presenciar en primera fila un partido del Deportivo Pasto, el actual club de Hidalgo, las imágenes que ha recibido le han quitado un peso de encima. En esa línea, el técnico reconoció que «Lo he visto a través de vídeos y me gusta».

Obviamente, el entrenador del Sporting no ha sido ajeno a la operación. La secretaria técnica le ha mantenido informado puntualmente. Por eso, Preciado ejerció de portavoz del club para explicar que «Alfredo y Emilio de Dios están allí. Las negociaciones van bien encaminadas, pero no sé nada más».

Como apuntaba Preciado, el director general del Sporting, Alfredo García Amado, se encontraba ayer en Sudamérica intentando cerrar la cesión del colombiano. No obstante, el escenario de la operación era Ecuador, concretamente Quito, y no el país de origen de Hidalgo. Ayer por la noche -mediodía en España- Amado rubricaba el principio de acuerdo con el club y con el jugador. El montante total de la operación asciende a 180.000 euros, una cifra muy lejana de los cerca de 300.000 euros que la entidad rojiblanca pretendía ofrecer a Congo por su renovación. Ahora, sólo falta que el jugador sea tan resolutivo como económico, porque el club necesita más alternativas en el ataque. Un gol en cinco partidos conforma el gris balance del equipo.

Falta de gol

La falta de gol se ha convertido en un tema de debate. Preocupa. Mucho. El equipo genera ocasiones, pero se queda en eso. Intentos fallidos. No obstante, el entrenador del Sporting reconocía que «si hay algo que trabajamos mucho es la definición, pero esto va por rachas». La de los últimos partidos se ha convertido en un problema. No hay eficacia. Barral es uno de los máximos goleadores de Segunda, pero la pólvora se le ha mojado. Karanka y Omar son las alternativas. También Luis Morán, aunque Preciado dejó claro ayer que el futbolista de Luanco «es una opción más, pero, hoy por hoy, nos aporta más en la banda o en la mediapunta. Además, sería muy complicado para él jugar arriba tan pronto».

Durante la entrevista en Punto Radio, el cántabro hizo una reflexión más reposada del partido del domingo, pero su impresión no había cambiado. Sus explicaciones fueron idénticas. Reiteró su preocupación por los errores. Insistió en la necesidad de corregirlos y defendió el trabajo de los suyos. A capa y espada. No tuvo ninguna duda. De hecho, el técnico subrayó que «la afición se partió las manos aplaudiendo y eso es un dato objetivo sobre el juego del equipo».

También tuvo palabras para el Málaga. Sobre la excesiva recompensa que se llevó de Gijón. El mensaje iba también dirigido hacia su entrenador, Juan Ramón Muñiz. Preciado recordó la lectura que había realizado el técnico del conjunto andaluz sobre el encuentro. Sobre este tema, no se mordió la lengua al decir que «él dijo que su equipo había controlado el partido, pero a mí no me gustaría controlarlo como ellos».

Hecho el balance del encuentro del domingo, el técnico se refirió a la relación que se ha establecido entre el equipo y los aficionados, y añadió que «si hemos recuperado la afluencia masiva al campo ha sido por nuestro estilo de juego, y no voy a renunciar a eso».

Por último, transmitió un mensaje de optimismo a la grada. No quiso 'mojarse' sobre la posibilidad del ascenso, pero recordó que «el Sporting lleva diez años esperando para subir y es una buena efeméride para conseguirlo». El otro 'guiño' que lanzó el cántabro fue con motivo de la visita al Sánchez Pizjuán, el próximo sábado. Preciado declaró sobre este campo que «a ver si lo conocemos para jugar contra los grandes el año que viene». Fue una declaración de intenciones y su deseo para el fin de año.

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