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RAMÓN BARAGAÑO
Lunes, 15 de diciembre 2008, 03:43
JOSÉ FRANCÉS y Sánchez-Heredero (y no López-Heredero, como escriben erróneamente algunos autores) nació en Madrid el 22 de julio de 1863 y falleció en esa misma ciudad el 10 de septiembre de 1964. Novelista, dramaturgo, crítico de arte y periodista, utilizó el seudónimo de 'Silvio Lago'. En 1900 empezó a colaborar en las revistas 'Gente Conocida' y 'Vida Galante', en las que publicó varios cuentos. Redactor de 'Alma Española', colaboró también en 'Blanco y Negro' (1905), 'El Liberal' (1906) y 'El Cuento Semanal' (1907). Posteriormente, ejerció la crítica de arte en 'Mundo Gráfico' (1919), 'Nuevo Mundo' y 'La Esfera' (1926). Dirigió las revistas 'Por Esos Mundos' y 'La Novela Semanal'.
Como escritor, destacó en la narración corta, género en el que consiguió destacados premios y que cultivó preferentemente. Escribió más de 400 cuentos y relatos, entre los que cabe citar 'Miedo', 'Páginas de amor', 'La ruta del sol' (1912), 'Cuentos del mar y de la tierra' (1915), 'La estatua de carne' (1915), 'Entre el fauno y la sirena', 'Cuentos de la vida, de la muerte y del ensueño', 'Dos hombres y dos mujeres en medio' (1923), 'El café donde se ama' (1925) y 'Los muertos viven' (1930). En su faceta de novelista se movió dentro de la estética del naturalismo, con frecuentes referencias al erotismo en sus obras. Destacan 'Dos cegueras' (1903), 'Abrazo mortal' (1904), 'El alma viajera' (1908), 'El misterio del Kursaal' (1911), 'La guarida' (1911), 'La danza del corazón' (1914), 'La mujer de nadie' (1915), su mayor éxito editorial, 'Como los pájaros de bronce' (1918), 'Sortilegio' (1921), 'El hijo de la noche' (1923) y 'Ella y los demás' (1924).
Como autor teatral publicó 'Guignol', 'Teatro del amor', 'Más allá del honor', 'Cuando las hojas caen', 'La bondad en el engaño', 'Libro de estampas', 'La moral del mar', 'La doble vida', 'El corazón despierta', 'Lista de correos' y 'Judith', tragedia en seis actos con la que obtuvo en 1944 el Premio Nacional de Literatura. Escribió también numerosos libros de historia y crítica de arte y un libro de contenido misceláneo, con alguna referencia autobiográfica, 'Miradas sobre la vida' (1925). Fue traductor al español de obras de Edgar Allan Poe, Arthur Conan Doyle, Charles Baudelaire y Pierre Clouys, y también fue asiduo conferenciante.
Escritor muy prolífico y de gran éxito de público, muchas de sus obras fueron traducidas a diversos idiomas: inglés, francés, italiano, alemán, holandés y portugués. Algunos de sus libros se han adaptado al cine, como 'La mujer de nadie', 'El hijo de la noche', 'La danza' y 'El hombre que veía la muerte'.
Méritos y distinciones
José Francés posee también una rica biografía relacionada con el mundo del arte. Miembro de número desde 1922 de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando, de Madrid, de la que fue también secretario perpetuo desde 1934; presidente de honor de la Asociación de Dibujantes, director de la Biblioteca y Museo Postales de la Dirección General de Correos, presidente del patronato del Museo Nacional de Reproducciones Artísticas, fundó los Salones de Humoristas en 1914, donde expusieron su obra dibujantes, caricaturistas e ilustradores. Miembro de las Reales Academias de San Jorge de Barcelona, San Carlos de Valencia, Ciencias Históricas y Bellas Artes de Toledo, Hispanic Society of America de Nueva York, Nacional de Bellas Artes de Lisboa, Nacional de Bellas Artes de La Habana y Brasileira de Bellas Artes de Río de Janeiro.
Socio de honor del Real Círculo Artístico de Barcelona, del Círculo de Bellas Artes de Madrid y del de Valencia, fue galardonado con el título de comendador de las órdenes del Mérito Civil, de España; de la Corona, de Italia; de la de Leopoldo, de Bélgica, del Libertador, de Ecuador, y oficial de la Legión de Honor, de Francia.
José Francés y Asturias
Este autor estuvo desde 1921 muy vinculado a Avilés, donde solía pasar la temporada estival, alojándose en la afamada fonda La Serrana, y donde tenía muy buenos amigos y era muy apreciado. Por su privilegiada posición en el mundo del arte, como académico y como crítico, jugó un importante papel impulsando las exposiciones anuales de la avilesina Sociedad de Amigos del Arte, creada en 1922, y ejerciendo de mecenas para algunos artistas plásticos locales. Sus méritos fueron pronto recompensados por el Ayuntamiento avilesino, que le nombró Hijo Adoptivo el 25 de agosto de 1926. Muy destacada también fue su intervención durante el proceso abierto para la declaración del casco antiguo avilesino como Conjunto Histórico-Artístico, incoado por el arquitecto conservador de monumentos de la zona cantábrica Luis Menéndez Pidal. La ponencia favorable a tal fin que José Francés, secretario perpetuo de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando, firmó facilitó la declaración, publicada por decreto en el Boletín Oficial del Estado el 27 de mayo de 1955.
Pero la vinculación de José Francés con Asturias trasciende lo avilesino y se manifiesta en la atención que prestó a diversos pintores asturianos (especialmente a Evaristo Valle y Nicanor Piñole) para que se dieran a conocer en Madrid, así como en varias publicaciones que dedicó a nuestra región. Entre ellas figuran 'El teatro asturiano' (1909), conferencia leída en el Centro Asturiano de Madrid el día 14 de junio de ese año, y 'La raíz flotante' (1921), novela casi mística, de tema costumbrista y localista, que constituye una «exaltación emocional y artística del alma de Asturias, pensada no sólo para los que allí viven sino para los millares de asturianos desperdigados por España y América» , según sus propias palabras.
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