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Arranque de las obras en el área del plan especial, en el mes de noviembre. Allí se levantarán 3.700 viviendas, la mayoría de ellas de protección. / J. PAÑEDA
13.500 viviendas en la zona rural
GIJÓN

13.500 viviendas en la zona rural

Cinco años después de la primera movilización contra el PGOU, los grandes proyectos se concretan Hay lugar para otros 4.000 pisos en suelo sin desarrollar del anterior plan y la cubierta ferroviaria prevé 1.500

O. ESTEBAN

Domingo, 1 de febrero 2009, 09:18

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El próximo día 7 de febrero se cumplirán cinco años de la primera marcha verde. Cinco años de la primera gran movilización (hubo luego otras dos) de la zona rural gijonesa contra un Plan General de Ordenación Urbana que empezaba a perfilarse. Dos días después de aquella protesta, el 9 de febrero de 2004, el Pleno aprobaba el borrador inicial del PGOU. Aunque la tramitación ha sido muy larga y el documento definitivo no llegó hasta 2007, los debates sobre el futuro urbanístico del concejo arrancaron entonces. Ahora, cinco años después de todo aquello, Gijón está poniendo las bases para ordenar como urbanísticos más de dos millones de metros cuadrados, que darán cabida a 15.000 nuevas viviendas, 13.500 de ellas en la zona rural y 1.500 en la cubierta ferroviaria. Sus planes están ya en marcha.

A esas 15.000 habría que sumar aún otras 4.000, aproximadamente, las que se levantarán en el suelo previsto en el anterior PGOU y aún no desarrollado. Estos espacios están, principalmente, en la zona urbana, en ámbitos anunciados durante las últimas semanas en barrios como Viesques, Nuevo Gijón, Contrueces o Pumarín. En total, casi 20.000 viviendas, cifra que, en teoría matemática, atendería las necesidades del concejo para los próximos diez años si se mantuviese la media de 2.000 licencias al año.

Pero, ¿en qué situación están los planes para esas grandes bolsas de suelo? Es evidente que, salvo en el plan especial de Roces, las obras no han comenzado en ningún sitio. Pero también es cierto que, en la mayoría, los planes y diseños han comenzado. Los más retrasados son los proyectos de Porceyo, donde se plantean unas 1.200 viviendas, y el Alto del Infanzón, donde se construirán 400 chalés. Mientras, el suelo para las 1.500 viviendas del plan especial de la zona ferroviaria «será susceptible de ser vendido a partir de 2011», asegura el concejal de Urbanismo, Pedro Sanjurjo. Ésta es una de las pocas bolsas de suelo, si no la única, de las diseñadas en el último PGOU para la zona urbana.

Proyectos y alegaciones

Porque junto a ésa están la de Castiello de Bernueces, con suelo para unas 3.700 viviendas (asegura Sanjurjo que no se llegarán a las 4.000 anunciadas en un principio) del que se está tramitando el proyecto de ejecución, paso previo a la formación de la junta de compensación y a la tramitación del proyecto de urbanización. Y la bolsa de Cabueñes, donde se levantarán entre 650 y 700 viviendas y cuyo proyecto ha provocado un fuerte rechazo vecinal, incluso la creación de una plataforma. En estos momentos se están contestando a las alegaciones, a través de la junta de gobierno y, tras ese trámite, vendrá la aprobación definitiva del plan. En este caso, los vecinos insisten en que se han cometido irregularidades y que, además, las empresas que se hicieron con el suelo no pasan por un buen momento económico.

Vendría después el plan de Granda, donde irán entre 1.700 y 1.800 viviendas, situadas junto al área de Roces que desarrolla Sogepsa, y para el que ya se ha aprobado el plan parcial de forma inicial. Faltaría el de Jove, uno de los más sorprendentes de este Plan de Ordenación, ya que la parroquia había sido 'eliminada' de entre las nuevas bolsas urbanizables. Pero una figura de la Ley del Suelo ha permitido a los promotores hacerse con el terreno y poder tramitar un cambio de calificación del suelo, siempre que se destine a vivienda de protección.

Jove, para 2010

Y así será, en un ámbito de unos 300.000 metros cuadrados donde se levantarán 1.700 pisos protegidos, pero que aún tardarán en llegar. De momento, el proyecto tiene el visto bueno del Ayuntamiento y de la CUOTA, y está pendiente de la formalización del convenio necesario para llevarlo a cabo. Quizás pueda comenzar a ser una realidad en 2010, a pesar de que es precisamente la vivienda de protección la que en estos momentos tiene mercado. A lo largo de este año, anuncia el concejal, «habrá más actuaciones de vivienda protegida en otros ámbitos urbanos».

Con todo, Sanjurjo lo tiene claro: «Prevaleció el interés general frente al particular. Es la utilidad pública del planeamiento». El edil asegura que, de haber atendido las alegaciones vecinales, «hubierámos hipotecado el suelo», aunque reconoce que «siempre puede haber sectores que se sientan perjudicados». ¿Cuál es su balance, cinco años después de la primera marcha verde? «Favorable».

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