Nuevo Roces seguirá sin consultorio médico

La ocupación progresiva del barrio de Nuevo Roces lleva años haciéndose notar y su impacto aún no se ha contenido. Representantes de la asociación de vecinos, acompañados de la alcaldesa Carmen Moriyón, se reunieron ayer por la mañana en Oviedo con la directora de general de Planificación Sanitaria, Concepción Saavedra, para hacerle llegar su reivindicación: «Solicitamos la instalación de un consultorio médico, pero la respuesta ha sido negativa», comentó Oscar Martínez, miembro de la junta directiva, que recogió la demanda y la expuso en la reunión.

El barrio, que protagoniza un crecimiento continuo de la población desde hace años, no cuenta con ningún centro sanitario periférico en la inmediaciones. «Somos más de 4.000 vecinos, sin acceso rápido a un médico y bastante aislados, otros barrios como Tremañes o La Camocha que tienen una población similar, si disponen de su propio centro», comento Martínez.

Nuevo Roces depende del área sanitaria número5 y la zona número 7 de la ciudad. Los vecinos del área tienen que desplazarse hasta el barrio de Contrueces para asistir al médico. «Ir al médico se ha convertido en un odisea, no sólo por llegar al centro en cuestión que ya es bastante difícil por las malas conexiones por coche, sino que varios vecinos tuvimos que poner quejas por el mal funcionamiento del ambulatorio, hay veces que tenemos que desplazarnos dos veces; una, para pedir cita y otra, para asistir a la consulta», afirmó Marina Fernández, vecina de Nuevo Roces.

El perfil del vecindario se divide entre quienes hacen vida en el barrio y para quienes su lugar de residencia no es más que una ciudad dormitorio. La falta de adaptación de los viales de entrada y salida a las necesidades de los peatones y las carencias en materia de equipamientos siguen siendo las principales reivindicaciones de los residentes. No hay colegio, farmacia ni cajero automático. Tampoco zonas deportivas ni supermercado, pero al menos sí cuentan con una escuela infantil, sede vecinal en construcción, dos líneas de autobús al servicio de los vecinos y una docena de bares.

Desde la asociación vecinal también afirmaron que contactarán con el Ayuntamiento para tratar de mejorar las comunicaciones y la accesibilidad a nuevos centros de salud. «No podemos permitir que más de 4.000 personas estén en esta situación, ninguno de los accesos a Nuevo Roces es seguro peatonalmente, si una persona mayor o impedida quiere llegar al ambulatorio de Contrueces, tiene que vivir una autentica odisea», afirmó Martínez.

Difícil solución

«Los vecinos han transmitido su propuesta, pero hay más lugares que tienen un problema similar. Nuevo Roces no cumple con los requisitos, la presión asistencial, que es mucho más pequeña que en otros barrios; creemos que más adelante podría ser viable, además el principal problema no es ese, sino los malos accesos y los problemas con el transporte público, con el que cuentan», afirmó un portavoz desde la Consejería de Sanidad.

Por el momento la situación tiene una difícil solución, habrá que esperar para ver sí finalmente se podrá instalar el consultorio en el barrio y las mejoras del pavimento se llevan a cabo.