Borrar
¿Quieres despedir a tu mascota? Puedes hacerlo en el nuevo canal de EL COMERCIO
José Luis Paraja y Ángel de la Calle, en los locales de la Semana Negra, junto a una de las figuras de personajes del género negro.

«La Semana Negra devuelve a Gijón más de lo que recibe», aseguran los organizadores

«Hemos hecho lo que teníamos que hacer. La pelota está en el tejado del Ayuntamiento», afirman tras ponerse al día con Hacienda

IVÁN VILLAR

Miércoles, 17 de mayo 2017, 01:03

«Nosotros ya hemos hecho lo que teníamos que hacer. Ahora la pelota está en el tejado del Ayuntamiento», zanjaba el director de contenidos de la Semana Negra, Ángel de la Calle, mientras el director del comité organizador, José Luis Paraja, mostraba el certificado de la Agencia Tributaria ratificando que la asociación responsable del certamen ya está al día con el fisco. El primero lucía una camiseta de la Resistencia -el brazo militar que en 'Star Wars' combate contra los restos del Imperio Galáctico- con el lema 'Únete a la Resistencia' en inglés. Y en el acto de presentación de la XXX Semana Negra, que los organizadores insistieron en centrar en la parte literaria y no en la económica «porque nos gusta mirar hacia el futuro», no faltaron referencias a su capacidad de resistencia a lo largo de los años. «No es fácil para ningún festival llegar a treinta ediciones. Y para uno tan singular, más difícil todavía», apuntó José Luis Paraja.

Los organizadores hicieron una rotunda defensa del formato del certamen. «Muchas veces se transmite la imagen de que es como una romería. Y estamos muy orgullosos de que lo sea, porque significa heredar las tradiciones populares de nuestro país, pero está articulada en torno a un arte mayor, que es la literatura. Nuestro objetivo fundamental es difundir el libro y la literatura y poner en contacto a autores con lectores. Lo que ocurre es que lo hacemos de una forma poco habitual, envolviéndolo en un gran festival popular con elementos muy heterogéneos. Nos ha costado mucho esfuerzo mantener eso y queremos seguir haciéndolo porque funciona. Aunque es legítimo que haya personas a las que incluso les desagrada, mayoritariamente a la ciudadanía le gusta», argumentó José Luis Paraja, confiado en «seguir así muchos años más». El director del comité organizador admitió que «no somos un festival neutro y eso nos trae muchas consecuencias», pero añadió que «tampoco somos un festival sectario. Admitimos a todo el mundo y cualquier propuesta que nos llegue a la Semana Negra, si tiene cabida y es realizable, se puede llevar adelante».

«Reverenciada» fuera

Paraja y De la Calle pusieron en contraste con las críticas que reciben en Gijón el prestigio del certamen a nivel nacional e internacional. «Fuera de nuestras fronteras, la Semana Negra es reverenciada. Es un festival admirado en todo el mundo y no hay más que ver la cantidad de 'semanas negras' que han aparecido al calor de la nuestra, aunque cada una adaptada a su entorno y ninguna tan singular como ésta». Ese carácter de evento de referencia, aseguraron, se traduce en beneficio para la ciudad desde dos puntos de vista. El primero, en términos de proyección exterior, pues «un faldón diario en los principales medios nacionales y el 'tren negro' abriendo los telediarios equivale a más de 100.000 euros de publicidad». Y el segundo, en gasto directo: «Los hoteles se llenan con la gente que viene a ver esto. Y, si exceptuamos un ascenso del Sporting, el récord de bajada de bandera de los taxistas de Gijón fue durante la Semana Negra de 2011. Devolvemos a la ciudad mucho más de lo que ésta aporta. La última vez que alguien lo estudió, dijo que por cada euro de subvención devolvíamos seis».

En este punto, los organizadores defendieron el cobro de subvenciones municipales. «Nosotros entendemos la cultura como un derecho. Por eso las actividades son gratuitas. Organizamos la mayor feria del libro de Asturias sin que les cueste nada a los libreros. Y ofrecemos charlas, firmas, exposiciones, música... ¿Está bien subvencionar la compra de un coche y no una conferencia? Otros ven la cultura como un bien, y que el que pueda se la pague. Yo fui un niño pobre y si cobraran entrada no podría ir. Así que mientras siga aquí, las actividades serán gratuitas», remarcó De la Calle. «Hay quien dice que esto debería ser privado y que podríamos concebirlo como un negocio para ganar dinero, pero no es el objetivo», le respaldó Paraja, quien destacó que el peso de la aportación municipal sobre el presupuesto del festival es inferior al que se da en otras ciudades, gracias a lo que ingresa por otras vías.

La asociación confía en que hoy el gobierno se sume en el Pleno a la mayoría de izquierdas que aprobará incrementar la subvención de 100.000 a 175.000 euros. El presupuesto del festival será «un poco más ajustado», en torno al medio millón de euros. Tras los problemas de este año, que atribuyen al retraso en el cobro de la ayuda municipal, prometen trabajar «con más cuidado y autoexigencia».

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

elcomercio «La Semana Negra devuelve a Gijón más de lo que recibe», aseguran los organizadores

«La Semana Negra devuelve a Gijón más de lo que recibe», aseguran los organizadores