La alcaldesa da marcha atrás en el uso del remanente tras la negativa de la Intervención

La concejala de Hacienda, a petición de todos los grupos de la oposición, retiró ayer de la mesa la propuesta de utilizar parte del remanente de tesorería a compensar las pérdidas sufridas por EMTUSA y Emulsa durante la crisis, operación que contaba con un informe en contra de la interventora municipal al entender que supondría una «infracción muy grave» de la Ley de Estabilidad.

Ahora la intención es esperar a que el Congreso apruebe la modificación de esta norma, vigente desde 2012 y que limita el libre uso por parte de las entidades locales de los superávits acumulados de los años anteriores. Y aunque el Ayuntamiento confía en que el cambio legislativo pueda ser una realidad ya en septiembre, desde Ciudadanos pidieron a la alcaldesa, «ya que es de su mismo partido, que presione al Gobierno de Pedro Sánchez para que modifique de una vez la ley en lugar de pretender que los concejales votemos una ilegalidad». Su concejal Rubén Pérez manifestó además su satisfacción por la «rectificación», ya que pese a apoyar la necesidad de hacer una aportación extraordinaria a las empresas municipales «eso no justifica incumplir la ley y que declaremos a Gijón como insumiso fiscal».

Tras las modificaciones presupuestarias ya aprobadas este año, en el remanente de tesorería quedan 14,5 millones de euros, de los que la ley obliga a destinar a la amortización de deuda 13,3 millones y a inversiones «financieramente sostenibles» 619.000. Por tanto, el Ayuntamiento solo podría usar libremente 562.807 euros. La intención del equipo de gobierno era aprobar en la comisión de Hacienda dos modificaciones con cargo al remanente.

La primera, de 223.672 euros, para ampliar las transferencias a la Empresa Municipal de Vivienda (para un servicio de intermediación para el alquiler) y al Centro Municipal de Transportes (para compensar la rebaja de tarifas). Salió adelante con la única abstención de Foro, PP y Vox, y dejó el remanente reducido a 339.135 euros. Insuficiente para la segunda modificación que se pretendía aprobar y en la que se pedían 5,4 millones para «atender las desviaciones presupuestarias» de EMTUSA y Emulsa por la crisis. Finalmente, ante la negativa de la Intervención y de la oposición, se deja para el futuro.

No es el único varapalo que sufrió ayer el equipo de gobierno. El segundo se refiere a su propuesta para suprimir con carácter retroactivo desde el 1 de enero las tasas de terrazas, del rastro, del mercadillo de La Camocha y del Mercado Ecológico y Artesano. Un dictamen del Tribunal Económico Administrativo Municipal «suscribe» el informe desfavorable emitido recientemente por la interventora y la jefa del servicio de Ingresos y considera que la modificación que se propone de las ordenanzas ya en vigor «no se ajusta a la legalidad» y contraviene principios como el de «igualdad» al beneficiar a unos sujetos específicos -por ejemplo, excluye a otros mercadillos-. El dictamen del tribunal tiene el voto particular de uno de sus miembros, que sí ve posible esa modificación, al igual que el secretario de la junta de gobierno. La aprobación de esos cambios se ha pospuesto para agosto, a la espera de las enmiendas de la oposición y de un informe de la Secretaría del Pleno.