«Aspiramos a que todos los gijoneses tengan una parada a 300 metros»

Juan José Piniella lleva tres años y medio al frente de una empresa que en 2019 rozó los 19 millones de viajeros y cuya actividad se verá influida necesariamente en los próximos años por los cambios en la movilidad urbana, con la entrada en vigor de una normativa más restrictiva para los coches, un plan con medidas concretas para el fomento del transporte público y la llegada de un nuevo modo de desplazamiento colectivo, el metrotrén.

-Iniciaron el año con una bajada de tarifas para los usuarios de bonos. ¿Se está notando en la demanda?

-Sí. Es pronto para hablar de una regla fija, pero lo cierto es que en enero tuvimos 55.000 viajeros más que en el mismo mes de 2019, lo que significa un crecimiento del 3,6% y el máximo desde 2010. Los usos con billete ordinario bajaron un 5,3% y los viajes con bono crecieron un 5,5%, con 70.000 más.

-¿Y se nota también la ampliación de la gratuidad hasta los 16 años?

-También. En enero hubo 82.839 viajeros con 13, 14, 15 o 16 años, que son 24.320 más que un año antes. Son un 41,5% más.

-La futura ordenanza de movilidad situará al transporte público como uno de los medios prioritarios, por delante del coche. ¿Qué espera que signifique para EMTUSA?

-Se tiene que traducir en dotar a la ciudad de infraestructuras que nos permitan ofrecer un transporte fiable, de calidad y que sea lo más rápido posible. Para ello debe crearse la red de carriles bus que viene fijada en el plan de movilidad, acompañada de otras medidas como las prioridades semafóricas y la redistribución de paradas, de la forma más uniforme que se pueda, de tal manera que todos los ciudadanos tengan una a menos de 300 metros.

-¿Habla de reubicaciones generalizadas de forma inminente?

-No, simplemente de tener una norma general. Nuestra aspiración es que las paradas no estén ni tan juntas que nos impidan tener un desarrollo comercial, ni tan separadas que desincentiven el uso del autobús. Ya lo estamos haciendo cuando tenemos oportunidad, como en Marqués de Casa Valdés, donde hemos unificado dos paradas. Y lo que está claro es que si apareciera una nueva línea tendrá ese principio.

-Mencionaba los carriles bus. ¿Hasta qué punto pueden mejorar su velocidad comercial?

-Evidentemente, mejorarán la fluidez del transporte urbano, pero, como digo, esa medida deben ir acompañada de otras, como las regulaciones semafóricas y la redistribución de paradas en un orden lógico. Todo ello tiene que llevarnos a elevar la velocidad comercial.

-¿Está previsto continuar con la supresión de retranqueos en las paradas?

-Sí. En los últimos tiempos hemos actuado en 34 paradas y está previsto hacerlo en 30 más. Contribuyen a mejorar la accesibilidad. Nuestros autobuses son 100% accesibles para el 100% de las personas y lo que nos falta es que puedan hacer su trabajo cuando llegan a la parada, algo que a veces no es posible porque está ocupada o mal diseñada. La supresión de retranqueos ayuda a eliminar estos problemas.

-Llevan tiempo probando modelos de autobuses híbridos. ¿Qué rendimiento tienen?

-Tienen pros y contras. Su coste es más elevado, aunque esperamos poder compensarlo con los ahorros en combustible a lo largo de su vida útil. Y además permitirán una reducción de emisiones drástica. Es algo que ya estábamos haciendo al incorporar vehículos diésel Euro VI, con un 90% menos de emisiones que los Euro III, que ya no existen en EMTUSA. Pero en diciembre los siete autobuses que incorporaremos serán híbridos y el compromiso es que desde ahora todos los vehículos nuevos sean medioambientalmente sostenibles, a través de híbridos o de las tecnologías que puedan aparecer en el futuro.

-¿Ya tienen fecha para su proceso de selección de personal?

-Aún no. Pero haremos la convocatoria de forma inminente. Habrá pruebas para distintos entornos de la empresa, aunque la más significativa será la de conductores, porque pretendemos incorporar 60 en los próximos cuatro años para cubrir jubilaciones e incapacidades y compensar carencias que puedan surgir.

-¿Servirá para tener más conductoras?

-Es indiscutible que esta es una empresa con mayoría de hombres en su plantilla y que lo deseable sería que se incorporaran más mujeres, pero será una convocatoria basada en los principios de igualdad, mérito y capacidad. Se incorporarán quienes demuestren más aptitudes.

-La línea 18 cambia este lunes de cabecera, con polémica.

-Cada vez que hay cambios hay personas que se sienten perjudicadas, pero nuestra obligación es beneficiar al mayor número de personas posibles. Llegaremos a 1.500 personas más. Y el cambio también es bueno para Nuevo Gijón: deshacemos nudos en una línea que pasaba dos veces por la misma parada e incluso devolvemos al barrio quince plazas de aparcamiento.

-¿Tienen en mente a medio plazo alguna reforma más general de su red de líneas?

-No. Aunque cuando el metrotrén sea una realidad sí deberemos analizar, con todos los datos, si es necesaria o no una remodelación parcial o global. De momento aún no sabemos dónde irán las estaciones ni las frecuencias de los trenes, que son condicionantes que determinarán si hay que repensar o no nuestras líneas.

-¿Será más competitivo?

-No puedo contestar, porque no conozco su oferta. Sí sé que, aunque parezca que el autobús va más atascado, nuestro tiempo medio para llegar al hospital desde la zona centro son 20 minutos.