Retiran la ballena de más de cinco toneladas que apareció muerta en la costa de Gijón

Esta mañana se desarrolló el operativo en El Musel para retirar el cadáver de la ballena jorobada que apareció flotando en la bahía de San Lorenzo de Gijón el pasado 4 de enero y que fue remolcado por una embarcación de Salvamento Marítimo hasta el puerto gijonés. El cuerpo del gran cetáceo, que llevaba más de una semana en el agua amarrado al Espigón II, fue izado a tierra con ayuda de una grúa de 40 toneladas. En el operativo también participaron la empresa Gijonesa de Actividades Subacuáticas, con varios buzos, y un camión con un sellado especial de la cuba para evitar el vertido de fluidos durante el traslado a Cogersa.

Este ejemplar de ballena jorobada que pereció cerca de la costa gijonesa resultó ser un ejemplar joven de unos diez metros de largo con un peso de 5,6 toneladas, muy por debajo de la envergadura de los adultos de esta especie que alcanzan las 36 toneladas y los 16 metros de largo.

Aunque el primer avistamiento del cadáver flotando tuvo lugar cerca de los bajos de las Amosucas por parte de una embarcación privada, el cadáver fue localizado posteriormente por la embarcación de salvamento marítimo 'Salvamar Rigel' cerca de la perpendicular del Cerro de Santa Catalina, bastante alejada de la costa, pero en la bahía de San Lorenzo.

Al ejemplar de esta especie de ballena, también conocida como yubarta, no se le realizó una necropsia para conocer las causas del fallecimiento, debido al avanzado estado de descomposición en el que se encontraba el cadáver. Lo que sí se hizo, no obstante, fue recoger muestras del cetáceo, para, estudiando su ADN, conocer a qué población pertenece. Hasta hace unos años era altamente infrecuente avistar yubartas en El Cantábrico, donde en los últimos años ya han aparecido varios ejemplares vivos y muertos. En el entorno de Musel llegó a avistarse un ejemplar joven, vivo, en 2016.

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