Un calderón muerto en la Escalerona

La marea arrastró ayer hasta la orilla en la playa de San Lorenzo un cadáver de calderón, un cetáceo de la familia del delfín que en esta ocasión alcanzaba los cuatro metros de longitud. El ejemplar fue llevado por las olas hasta el entorno de la Escalerona, en una jornada marcada por los intensos aguaceros que hicieron que la playa estuviera prácticamente vacía. Los bomberos izaron el cadáver del delfín con la ayuda de una grúa desde la arena hasta el Muro, donde se hicieron cargo de él los servicios de limpieza de Emulsa. La llamativa escena del cetáceo levantado por la grúa fue contemplada por numerosos viandantes desde el Náutico. Se da la circunstancia de que parte de la playa permaneció ayer cerrada al baño, con bandera roja, como consecuencia de los alivios del Piles por los aguaceros.

La llegada de cetáceos a la costa gijonesa no es infrecuente. Hace poco más de un mes fueron avistados dos ejemplares, también en las proximidades de la Escalerona. Hace un año fue retirado un ejemplar de unos 300 kilos de la playa de Serín. En esa ocasión, el cadáver también fue arrastrado hasta la orilla desde la isla de la Tortuga y su rescate fue más complicado por tratarse de una zona de acceso complicado para los servicios de emergencia.