Ciudadanos reclama un «registro de lobbies» que recoja todas las reuniones

El concejal de Ciudadanos, José Carlos Fernández Sarasola, anunció ayer que su grupo propondrá la creación de un «registro de lobbies» en el que sería obligatorio estar inscrito para poder celebrar reuniones con miembros del equipo de gobierno o con cualquier alto cargo municipales. Explicó que se trata de una figura «habitual en Europa» y que ya existe en otros ayuntamientos e instituciones. Además de la mencionada inscripción previa, quien esté interesado en ser recibido por la alcaldesa, sus concejales o los directivos municipales «tendrá que informar del interés o actividad de la empresa o entidad a la que representa, así como de la fecha y el objetivo de la reunión». Estarían exentos de estas obligaciones las entidades que ya estén inscritas en los registros municipales de asociaciones y fundaciones.

Fernández Sarasola considera que con este registro, que su grupo ya pidió incluir en la ordenanza de Transparencia y Buen Gobierno aprobada en 2016, «se dificultaría cualquier intento de corrupción. Los gijoneses tienen derecho a conocer con quién y para qué se reúnen los cargos municipales. Así evitaríamos tener que enterarnos de estos encuentros por los sumarios judiciales y no habría ninguna sospecha sobre su finalidad y contenido».

El año pasado, mientras se encaminaba a su reunión con el jefe del servicio de Modernización, 'El Patatero' le explicaba a su acompañante de Infaplic que los técnicos que les iban a recibir «no saben con qué contacto vengo». Saber quién impulsó encuentros como ese es uno de los objetivos de la comisión no permanente sobre el 'caso Enredadera' aprobada esta semana por el Pleno.