Las consultas externas de Cruz Roja se mudan a la calle Adosinda

Cruz Roja gana espacios para mejorar la atención a los pacientes. Desde hace un par de semanas, las consultas externas ocupan un local de planta baja anexo al hospital, en la calle Adosinda. El espacio -que anteriormente había ocupado un negocio de alimentación- cuenta con 800 metros cuadrados en los que se han distribuido once consultas que, con el traslado, han ganado en amplitud y accesibilidad. Las consultas de traumatología, oftalmología, ortogeriatría, enfermería, anestesia, cirugía vascular, cirugía plástica, cirugía general, alergias y las de preoperatorio se atienden ahora en este nuevo espacio que cuenta con la ventaja de tener un acceso directo, e interno con la zona de pruebas complementarias del hospital.

Con el traslado de las consultas externas, por las que al año se calcula podrían pasar unos 20.000 pacientes -entre primeras consultas y sucesivas-, «se garantiza la independencia de los dos circuitos, el de hospitalización y el ambulatorio». El gerente del hospital concertado, Leopoldo Álvarez, destaca que se ha ganado en agilidad y comodidad. También en privacidad, porque ahora los pacientes ya no son llamados a consulta por su nombre y apellidos sino que, al llegar, reciben un código -una combinación de letras y números- que los identifica. De esta forma, se permite también un mejor control de los aforos.

Por otra parte, el espacio que han liberado las consultas externas en la primera planta del hospital de la calle Uría se destinarán a habilitar catorce nuevas camas para la unidad de cuidados paliativos, que ya cuenta con 120 habitaciones dobles. La particularidad es que estas habitaciones serán individuales.

De momento, no hay plazos fijados para acometer estas obras ya que dependerán en buena medida de la evolución de la pandemia por el nuevo coronavirus. Álvarez garantiza que, en cualquier caso, no pararán la actividad habitual del hospital. Las que sí se están llevando a cabo en la actualidad son las que permitirán contar con un segundo montacamillas.