Crean una Comisión del Litoral, técnica y sin grupos políticos ni sociedad civil

Un espacio más técnico, sin grupos políticos ni sociedad civil. Así será la Comisión Técnica del Litoral, un órgano de nueva creación que vendrá a sustituir al extinto Observatorio de la Playa. El concejal de Medio Ambiente y Movilidad, Aurelio Martín, escogió la comisión de seguridad, movilidad y medio ambiente para hacer un anuncio que no gustó a ninguno de los grupos presentes, que reprocharon al edil el incumplimiento del acuerdo plenario alcanzado el pasado 8 de octubre y en el que la oposición al completo instó al gobierno local a restituir el Observatorio.

Lejos de ocultarse en excusas, Martín reconoció no tener previsto cumplir lo dictado en el Pleno y explicó las funciones del nuevo órgano, presidido por el concejal e integrado por las jefaturas de servicio de Medio Ambiente y del Servicio de Prevención y Extinción de Incendios; las gerencias de EMA y EMULSA; las direcciones generales de Urbanismo y Obras Públicas; la jefatura de la Policía Local y la Dirección general de Turismo. Perfiles técnicos que analizarán los estudios, informes y propuestas encargadas a empresas especializadas, relativos a las infraestructuras de conducción de aguas residuales y depuración, al estado de conservación y actividades desarrolladas sobre el arenal de las zonas del litoral que constituyan playas abiertas, así como cualquier otra zona que en la actualidad se encuentre cerrada al baño.

Una vez finalizadas estas reuniones, cuya fecha de inicio está prevista para el próximo 7 de noviembre, la Comisión trasladará un extracto de los acuerdos adoptados al consejo sectorial de Medio Ambiente, como órgano de participación de la ciudadanía, agentes sociales y entidades, quienes consideran este proceder como «una muestra más de oscurantismo».

Por su parte, la Plataforma contra la Contaminación afirmó ayer, tras analizar los datos aportados en el consejo sectorial, que el Ayuntamiento «sigue mareando la perdiz». «Se pone de manifiesto los numerosos incumplimientos de medidas que ya deberían estar en marcha y siguen anunciándose a bombo y platillo», afirman, en relación con la instalación inmediata de una estación fija en el Lauredal, que tendrá que esperar más de lo pactado, o mayores inspecciones en zonas industriales. «Que se dejen de protocolos y de anuncios grandilocuentes. Tienen una ordenanza municipal aprobada en 2017 con la que pueden actuar frente a lo que venimos denunciando. Solo hace falta valentía y voluntad política para hacerlo», exponen desde la plataforma vecinal.