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O. SUÁREZ
GIJÓN.
Martes, 5 de marzo 2019, 03:01
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Cargaron pulpo, bacalao, carabineros, botellas de vino -blanco y tinto-, cremas de afeitado, cremas hidratantes, cuchillas de afeitar, laca e, incluso, mecheros. Todo ello, sin pasar por caja. Un botín de mil euros en distintos supermercados con el que pretendían regresar a León. Fueron interceptados antes por la Policía Nacional, por lo que no pudieron disfrutar ni de las cremas ni de los vinos.
Los agentes arrestaron el pasado miércoles a una pareja de 25 años, residente en León, por un delito de hurto. Fueron alertados por el vigilante de un establecimiento comercial del barrio de Laviada, que había observado cómo la mujer ocultaba la mercancía y abandonaba la tienda. La Policía vigiló sus movimientos y descubrió que la estaba esperando un individuo en un coche, «alerta a lo que estaba sucediendo y dispuesto a huir del lugar». Los policías comprobaron que en el interior había más efectos «conseguidos de forma ilícita». Había actuado, presuntamente, en cuatro supermercados de la zona. Ambos tenían numerosos antecedentes por delitos contra el patrimonio y delitos violentos.
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