«¿Qué tiene de especial la raza asturcón? Que es de Asturias, y para mí no hay otra»
Llorenç Bosch y Lorena Rodríguez coparon los primeros puestos en el concurso de manejadores en un día con premios a los productos de la huerta
Un día en Agropec puede dar mucho de sí. Todo es cuestión de organizarse. Y si luce el sol, mejor aún. Para el domingo se reservan las últimas competiciones y las entregas de premios. Así que un visitante ocasional tiene la oportunidad de encontrarse ese día con los mejores. Y esto se puede aplicar a las razas autóctonas, a las gallinas, los patos, las tórtolas y las palomas. Las mejores vacas frisonas, quienes no hubiesen acudido el sábado, aguardaban en el pabellón central con sus escarapelas que las distingue como ganadoras.
Publicidad
Pero siendo ordenados, para la mañana del domingo se reserva el nombre de los mejores manejadores, que da continuidad -y cierra el palmarés- al campeonato nacional de Conafe. En esta edición el premio se fue hasta Menorca, a manos de Llorenç Bosch. «Un buen manejador tiene que conocer al animal, sus posibles defectos para taparlos y que se vea mejor en pista», explicaba instantes después de ser reconocido. Detrás de él quedó Lorena Rodríguez, de Lugo. «Ha faltado una mejor colocación de las patas traseras, aunque ha estado bastante reñido», explicaba la subcampeona, para quien la cita de Gijón era su tercer concurso. Sobre cómo se entrena uno para llegar a los más alto del podio, el menorquín, de la ganadería Sob Quart, lo resumía en «ir entrenando en casa y en los concursos. Al final vas mejorando y aprendiendo de los mejores». Ellos fueron los dos primeros en la categoría absoluta; Claudia López, de la ganadería López Fontela y Otros de La Coruña, venció en la infantil y María Otero, de la ganadería Fontixón de Lugo hizo lo propio en la junior.
La prueba se prolongó durante tres horas, justo a tiempo, a la una de la tarde, para cambiar de pabellón y disfrutar con lo mejor de lo mejor de las razas autóctonas. Esto es así porque el concurso fue días atrás y ayer lo que se podía ver era a los ganadores. Los que siguen dejando con la boca abierta, a grandes y pequeños, son los asturcones.
Mel Amandi, de Tornón (Villaviciosa), fue uno de los que se llevó el gato al agua. ¿Por qué? Tomen nota: «Frente ancha, hocico cargado, perfil cóncavo y pata fina», entre otras muchas características ganadoras. Amandi no tiene ninguna duda cuando se habla de esta raza. «¿Qué tiene de especial? Que es asturiana, y para mí no hay otra». En lo lúdico, Alimentos del Paraíso apostó por un taller, con degustación, con truchas, chosco, verdinas y razas autóctonas. Porque la jornada también iba, aún más, de productos de la tierra. Van ganando un espacio cada vez mayor, en este caso en el marco del 44 concurso de la huerta asturiana, que entregó sus galardones al cierre de la edición. Ángeles Alonso fue la vencedora en el lote de hortalizas y José Antonio Rubiera en el de frutas. El especial al mejor lote de fabada fue para María Teresa López. Y así, entre una cosa y otra, se acabó el día. Y la 37 edición de Agropec, por la que pasaron 77.428 visitantes, según cifras de la Cámara de Comercio.
1 año por solo 16€
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión