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Pilar Álvarez y Fernando Iglesias preparan el menú especial en la Cocina Económica. CAROLINA SANTOS
«Por mi hijo decidí dejar de ser una persona conflictiva»

«Por mi hijo decidí dejar de ser una persona conflictiva»

La Cocina Económica sirve un menú de El Restallu con motivo del Día del Padre

MARLA NIETO

GIJÓN.

Miércoles, 20 de marzo 2019, 03:29

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El Día del Padre es especial. Así lo considera el equipo de la Cocina Económica, que ayer quiso sorprender a sus usuarios con un menú diferente para celebrar esta jornada. Allí estaba el luarqués Joaquín Quintana, quien a sus 54 años y con un «buen currículum» como guarda de seguridad, la vida le ha llevado a elaborar pulseras de cuero y venderlas en la calle. Vivió muchos años en Murcia, donde tiene un hijo ya mayor de edad, pero prefirió Gijón para hacer su vida: «Tenía a mi hijo conmigo y dormíamos en la calle», confiesa. Actualmente vive con su ahijada y paga el alquiler de la habitación «gracias a ayudas y a lo que gano por vender las pulseras». Reconoció que «por mi hijo dejé de ser conflictivo», porque, dijo, eso fue lo que le llevó a tener que vivir en la calle. «En un día como hoy (por ayer) le echo mucho de menos, hace bastante que no lo veo», indicó. Diferente motivo, pero similar situación actual es la de Abraham Marante, ingeniero mecánico procedente de Cambados a quien el narcotráfico arruinó la vida. «En Galicia es demasiado fácil acabar en drogas. Con dieciséis años lo probé y a los dieciocho me fui de casa. Me pagué yo solo los estudios y me quedé a una asignatura de graduarme», afirmó.

Ha sido mecánico de coches de rally, profesión que abandonó «tras la muerte de tres amigos íntimos a quienes un coche arrolló en La Coruña» y también montador de orquestas gallegas. «Hoy estoy en la calle porque el consumo me trajo aquí. Ya lo he dejado y busco trabajo de forma activa», reconoció.

La intensidad de las sonrisas con las que salían los que acudían ayer a la Cocina Económica, tras una «comida de diez» por el Día del Padre, solo la puede explicar el brillo de sus ojos. A voces bajaban las escaleras expresando «la exquisitez» del menú que el restaurante El Restallu ofreció de manera desinteresada para trescientos servicios. «Llevamos haciendo esto desde hace más de quince años, desde que abrimos», contó la dueña, Pilar Álvarez, junto a su marido Fernando Iglesias. Según explicaba la chef, «una vez al año hacemos una comida para ellos, pero no siempre coincide con alguna fiesta. Esta vez sí». Fabada de primero, cachopo de merluza con ensalada de segundo y de postre una «magnífica» tarta de fresas. Tuvieron en cuenta también a los musulmanes, a quienes propusieron fabes con almejas. «Empezamos hace una semana con los preparativos, porque tener que hacer veintiocho tartas, por ejemplo, lleva bastante tiempo», señaló.

Pero el mérito no solo lo llevan ellos. Sor Franca es la encargada de gestionar que todos aquellos que lo necesitan no solo cubran esa carencia, sino que además disfruten de un menú diferente. «Ellos están muy agradecidos, cada vez que hacemos esta comida especial, se les alegra la jornada», señaló. Y es que según relataba sor Franca los comensales «son los de todos los días», pero en estas ocasiones «hasta se envían wasaps entre ellos para avisar cuando saben que será el menú de El Restallu».

No era el ambiente de siempre, algo «se cocía» en la Cocina Económica y ellos lo sabían. «Esta es la mejor vez que como en 35 años», destacaba Ángel García mientras abandonaba las instalaciones. «Se comió divinamente», añadió Lucas Cavero, okupa en un edificio de la calle Corrida, situación que no duda en recalcar. «Ha sido un detalle del dueño de El Restallu que hayan hecho este menú por un día tan emotivo», concluyó Cavero, un «revolucionario» gijonés de padre vasco y madre de Colunga, aficionado al Sporting y «excompañero de clase del exfutbolista Luis Enrique». Es, ante todo, optimista de nacimiento: «Me gano la vida como bien puedo, pero nunca hago daño a nadie. Organizo incluso visitas guiadas a mi casa sin pedir nada a cambio y la gente me da la voluntad».

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