María Moirón (pareja de David Velasco) y María Díaz (madre de Andrés Velasco), seguidas de otros familiares poco después de conocer el fatal desenlace del rescate. D. ARIENZA

«Estaban muy ilusionados con los Reyes para sus niños»

Los dos fallecidos son de Aller, aunque crecieron en Mieres. Tenían, sumados los de sus parejas, cuatro y cinco hijos

I. VILLAR / M. MENÉNDEZ

GIJÓN.

Jueves, 6 de enero 2022, 01:05

Inconsolable. Era la situación de María Díaz en el momento en el que el furgón funerario aparcó frente al colegio de San Vicente de Paúl para recoger los restos de su hijo Andrés Velasco Díaz, de 39 años. Los responsables del operativo de rescate ya habían comunicado minutos antes la desgraciada noticia a los familiares, pero la llegada del vehículo lo volvía todo demasiado real. «Quiero verlo, me da igual. Que me dejen verlo antes de meterlo en la caja», gritaba con la voz desgarrada mientras varios parientes trataban de calmarla. Era imposible, pues bajo la lluvia había estado esperando durante largo tiempo un milagro que tampoco llegó para su primo David Velasco Velasco, de 40 años, el segundo fallecido en el derrumbe.

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Aunque originarios del concejo de Aller, ambos crecieron en Mieres, donde de hecho aún vivía David. Andrés lo hacía en Oviedo, con su actual pareja, María Moirón, hija de uno de los supervivientes. El primero llevaba apenas seis meses trabajando para Solarina Construcciones, la empresa de reformas con cinco años de actividad y sede social en el polígono de Roces que estaba a cargo del arreglo del techo de unas aulas del colegio que hacía tiempo que venían dando problemas relacionados con las humedades. Su primo David, exalumno de la Fundación Docente de Mineros Asturianos (Fundoma), llevaba ya un año en ella. Y la trayectoria de ambos había estado siempre ligada al sector de la construcción. María Díaz aseguraba que su hijo y su sobrino «estaban muy contentos ahí» y añadía que «los dos eran muy buenos y se llevaban muy bien. Si al menos se hubiera salvado uno...».

Explicaba que la última vez que había hablado con su hijo Andrés fue aún este martes. «Me llamó para decirme que iba a venir con los Reyes para los niños. Estaba muy ilusionado con ello. Y mira qué Reyes vamos a pasar ahora», lamentaba. Los dos fallecidos eran padres, y ambos por partida múltiple. David tenía tres hijos, a los que se sumaban otros dos de su actual pareja. «En verdad para él eran los cinco como hijos propios», apuntaba María Moirón. Andrés, por su parte, era padre de una pequeñas de seis años y sumaba otros tres de su pareja, «que le querían muchísimo», según afirma su madre.

Último día de tajo

Vicente Moirón, suegro de David Velasco y uno de los supervivientes del siniestro, señalaba que la de ayer era la última jornada de trabajo en el colegio San Vicente de Paúl, donde llevaban realizando trabajos desde el lunes aprovechando el parón vacacional y con la intención de que el centro pudiera retomar la próxima semana las clases con normalidad.

Los familiares de los dos fallecidos siguieron a pie de calle todo el operativo de rescate, confiados en que ambos pudieran ser rescatados con vida a pesar de las dificultades que se encontraron los bomberos para llegar hasta ellos. Lo hicieron desde enfrente del colegio, donde recibieron la solidaridad de los responsables del restaurante Las Candelas, que les facilitaron agua y sillas para soportar mejor la espera. También les acompañaron varias religiosas de la congregación de las Hermanas de la Caridad, titular del edificio. La madre de Andrés Velasco recibió además en los momentos más duros el apoyo emocional de la concejala Ana Isabel Menéndez, psicóloga, quien se acercó al lugar de los hechos.

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Desde la calle Caridad también siguieron los trabajos de rescate la alcaldesa, Ana González; el presidente del Principado, Adrián Barbón; la consejera de Educación, Lydia Espina, y los ediles de Seguridad Ciudadana, Urbanismo y Obras Públicas.

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