Los impagos del IBI y los pleitos por la plusvalía dejarán un agujero de 8,6 millones en 2021

El Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI), el de plusvalía y el de construcciones, instalaciones y obras (ICIO) serán los ingresos que mayor caída sufran en 2021, según las estimaciones realizadas por el área económica del Ayuntamiento y que, junto con las que vaticinan además un importante aumento de los gastos, han servido de base al equipo de gobierno para renunciar a la presentación de un nuevo presupuesto para el próximo ejercicio y optar en su lugar por prorrogar el de 2020. La concejala de Hacienda, Marina Pineda, ya avanzó hace una semana que el próximo año entrarían en las arcas municipales 7,9 millones de euros menos de lo que se preveía para el vigente ejercicio. Y ayer, en comisión municipal, presentó el desglose de unos cálculos sobre los que parte de la oposición ya ha empezado a plantear dudas.

Por IBI, una de las principales fuentes de financiación del Ayuntamiento y que representa más de la cuarta parte del total de ingresos, los técnicos prevén para 2021 una recaudación de 62,8 millones de euros, que supondría 4,3 millones menos de lo que estaba presupuestado para 2020. O, lo que es lo mismo, un descenso del 6,4% con respecto a los 67,2 millones que había como punto de partida. A diferencia de lo que ocurre con otros conceptos, para los que se hace una estimación del dinero que entrará a lo largo del ejercicio, a la hora de incluir el IBI en los presupuestos se tiene en cuenta la recaudación del año precedente, dado que es un ingreso que no se convierte en realidad hasta finales de año -el grueso de los recibos se cobran en noviembre y a través de los Servicios Tributarios del Principado-. La cifra que aparece en las previsiones para 2021, por tanto, se correspondería con los pagos realizados este año, que los técnicos prevén que cierre con «un menor porcentaje de recaudación» por impagos debido a la crisis económica.

El IBI diferenciado a los bienes de uso empresarial de mayor valor catastral, que debía cobrarse por primera vez en 2020, quedó en suspenso por resolución de Alcaldía, por lo que ese dinero no llega a computarse en las cuentas de 2021, aunque ya no lo hacía en las de este año, pues la recaudación que se recogía era la de 2019. Sí se nota en las previsiones una variación al alza de la parte del IBI correspondiente a los bienes «de características especiales», como el puerto, la térmica o el embalse de San Andrés, que vieron elevado este año su tipo impositivo del 0,6% al 0,79%. De 1,4 se pasará a 1,9 millones el próximo año.

En lo que respecta a la plusvalía, prevé asimismo una caída de 4,2 millones de euros, pasando de los 14,5 millones estimadon para este año a 10,2. Los técnicos atribuyen esta bajada principalmente al aumento continuo de las sentencias contrarias después de haber cobrado durante años este impuesto en casos en que el inmueble que cambiaba de propiedad (principalmente por venta) no había registrado un incremento de valor desde el último cambio de titularidad sino una bajada, demostrada a través de las tasaciones.

Por el impuesto de Construcciones, Instalaciones y Obras prevé ingresar 3,5 millones de euros, que son 1,5 menos de lo presupuestado para 2020. También experimentará un importante descenso el impuesto sobre los vehículos de tracción mecánica (viñeta), por el que llegarán a las arcas municipales 10,2 millones, 864.000 euros menos de lo que se estimaba para este ejercicio.

En el apartado de tasas, precios públicos y otros ingresos destaca el descenso de 872.000 euros en la correspondiente al uso privativo del suelo o el subsuelo por empresas de suministros (electricidad, gas, internet...), ligada a la facturación anual de cada empresas. Se pasará de 5,9 a 5 millones. También esperan una caída similar, 848.000 euros, de las multas de tráfico, que bajarían de 5,7 a 4,8 millones. Y otros 2,5 millones menos de ingresos por las transferencias autonómicas para los planes de empleo (no se presupuesta nada, frente a los 1,5 millones que hubo este año) y a un menor volumen de desinversiones por parte de las empresas beneficiarias del fondo de capital riesgo Gijón Invierte (este año estimaban 2 millones y el próximo solo 500.000 euros).

Frente a estas bajadas, también hay conceptos que suben. El que más, el que hace referencia a las transferencias estatales a través del Fondo Complementario de Financiación, que pasarán de 53 a 57,3 millones. Del IRPF se esperan 717.000 euros más. Y del IVA, 684.000. También subiría en 334.000 euros la recaudación por el impuesto de actividades económicas. Y en la tasa por instalación de terrazas se presupuestan 75.000 euros más que hace un año, si bien el millón de euros que se esperaba ingresar en 2020 se quedó en nada al suspenderse su cobro por la covid.