Instalada la segunda cruz de la iglesia de la Universidad Laboral

La segunda de las cruces que adornan el exterior de la iglesia desacralizada de la Universidad Laboral de Gijón, la de la linterna, ya ocupa su lugar. Se trata de una reproducción en el mismo material que la original, que desapareció después de que un rayo impactara en ella a finales de los años 80 y cayera al suelo, arrastrando en la caída parte de una de las esculturas religiosas que forman parte de la fachada exterior del templo. En su lugar se colocó otra cruz idéntica, pero en material de fibra de vidrio, que presentaba un notable deterioro tanto interna como externamente. Su instalación se dio por concluida hoy.

Se tardó dos meses en fabricar la nueva cruz, tarea de la que la empresa gallega Citanias, encargada de las obras de restauración de la iglesia, encargó a la empresa de restauración Auriga, con taller en Avilés. De menores dimensiones que la de la Victoria, que preside la entrada al templo, la cruz de la linterna mide 2,4 por 1,5 metros. «El acabado final aplicado fue mediante una pátina en caliente en base a ácido con una dosificación específica. Este tratamiento ataca al cobre para envejecerlo y dejarlo estable». Se utilizó en su fabricación un latón de tres milímetros idéntico al usado para la Cruz de la Victoria, que fue reemplazada el pasado mes de julio, treinta años después de que fuera retirada de su emplazamiento.

Para colocarla en la linterna de la cúpula, a sesenta metros de altura, la cruz tuvo que ser alzada los primeros 33 metros por la fachada, empleando un montacargas, cuatro operarios, con la ayuda de un compañero desde lo alto de la cúpula, la portaron a mano ascendiendo los más de veinte metros de la cubierta. De ahí, hasta su posición final, se recurrió al andamio instalado.

Similar operación se siguió con el orbe en el que esta se apoya, también de nueva factura y también salido del taller de fundición artística de Auriga. Se trata de una esfera de 1,2 metros de diámetro para la que se empleó la misma aleación de latón que para la cruz.

Para reemplazar esta pieza, los restauradores necesitaron cinco semanas de minucioso trabajo. Si bien en un primer momento se había pensado en recurrir a la técnica del hidroformado, con una inyección de agua a presión elevada, para reproducir el orbe, finalmente éste fue elaborado a mano. Para ello, explican fuentes de Citanias, «se prepararon veinticuatro piezas que se soldaron entre ellas para confeccionar una primera forma semiesférica. Posteriormente, con un martillo, se fue golpeando contra un yunque y un cilindro especial preparado para este trabajo».

La reposición de cruces forma parte de un modificado de obra por importe de 80.000 euros que amplió los trabajos iniciados el pasado verano para la rehabilitación de la cúpula de la Iglesia de la Laboral, encargo que la Consejería de Cultura puso en manos de Citanias bajo la supervisión de Lumo Arquitectos.

Concluida esta tarea, quedan ya solo remates para completar el proyecto de mejoras en la Iglesia. Fuentes de Citanias afirman que se mantiene el plazo de finales de septiembre para la entrega de los trabajos, aunque el avance de los mismos en los próximos días estará sujeto a las condiciones meteorológicas, apuntan.

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