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Martes, 16 de enero 2018, 03:18
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Las antenas de telefonía móvil fueron determinantes a la hora de procesar a Abdou Ndiaye, 'Makele', ya que situaron su teléfono móvil en el entorno de la vivienda en El Lauredal de la víctima, Sonia Meléndez Mitre, justo a la hora en la que los forenses sitúan la hora de la muerte, entre las 16 y las 17 horas. El acusado negó desde que fue detenido, y ayer también en la primera sesión del juicio, que el día del crimen hubiese estado en el piso de su expareja, un extremo que los datos técnicos obtenidos por la Unidad de Delincuencia Especializada y Violenta (UDEV) de la Policía Nacional parecen rechazar, ya que su número fue detectado en la zona por varias señales de telefonía.
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