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Varias de las integrantes de la asociación, ataviadas con trajes de época, mojan los pies en las aguas de San Lorenzo.

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Varias de las integrantes de la asociación, ataviadas con trajes de época, mojan los pies en las aguas de San Lorenzo. PALOMA UCHA

San Lorenzo revive los felices años 20

La Asociación de Mujeres de La Corredoria cumple con la tradición de los baños de ola | Más de 30 socias lucieron bañadores de época en Gijón en una ruta que continuarán hasta el viernes por Luanco, Candás, Salinas y Rodiles

MARLA NIETO

GIJÓN.

Martes, 3 de septiembre 2019, 01:44

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Como si acabaran de salir de un cuadro de Sorolla, una treintena de mujeres aterrizaron ayer en la ciudad vestidas con bañadores realizados por ellas mismas y basados en diseños de los años veinte. A rayas blancas y azules, con gorro a juego y sombrillas blancas de tela bajaron al arenal de San Lorenzo recreando lo que fueron antaño los baños de ola de septiembre. Son las integrantes de la Asociación Libre de Mujeres de la Corredoria, un grupo que cada año, desde 2009, mantiene viva esta peculiar costumbre.

«Hace diez años, la que era secretaria en aquel entonces lo propuso. Falleció, y nosotras decidimos llevar a cabo su idea. Ya anteriormente veníamos a darnos los baños, pero desde ese año lo hicimos disfrazadas con los trajes históricos», explicó la presidenta de la asociación, Teresa Ruiz.

Cada una de ellas elabora su propia indumentaria. «Nos inspiró una de las profesoras que tenemos en la organización. Dio ideas de cómo podíamos hacer los trajes y así empezamos a diseñarlos», apuntó la secretaria, Laura Nieto. Para ellas, esta actividad es «una manera de ocupar nuestro tiempo, un acto de camaradería. Como la gente puede ver, no tenemos sentido del ridículo, nos gusta llamar la atención, que la gente se pregunte quiénes somos y por qué vamos así vestidas».

«Nos gusta llamar la atención, que la gente se pregunte por qué vestimos así»

«Lo pasamos genial»

Tras su paso por Gijón, hoy les toca lucir sus atuendos en la playa de Luanco, mañana en Candás, el jueves en Salinas y el viernes finalizarán la ruta en Rodiles. Desde las cuatro de la tarde y hasta las ocho, disfrutan de los últimos retazos del verano remojando sus pies en el agua. «Nos lo pasamos genial, tenemos un montón de anécdotas, quizá la más destacada fue el día que una empresa de agua asturiana nos ofreció realizar un vídeo con nosotras como protagonistas, porque, según ellos, nuestros trajes iban muy en concordancia con su imagen de marca. Así que nos grabaron y lo subieron a sus redes sociales y nosotras a las nuestras», expuso Nieto. Pero, para ellas, la más graciosa fue cuando «pensaron que éramos monjas que veníamos a darnos un baño».

Remedio contra la gripe

Los baños de ola de septiembre son una tradición que la reina Isabel II puso de moda en el siglo XIX y que ha continuado hasta hoy, no solo por este colectivo de mujeres, sino por muchos ciudadanos. Consisten en, durante nueve días consecutivos, acudir a la playa para bañarse, independientemente del tiempo que haga. Se hace, según se dice, para protegerse de los futuros catarros y gripes que pudiesen aparecer durante el invierno. Los gijoneses se muestran cada vez más dispuestos a llevar a cabo este ritual y, aunque no haya pruebas científicas de que surta efecto como remedio contra los resfriados, lo cierto es que, según constatan, les produce cierto bienestar tanto a nivel físico como mental.

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