«A Moriyón le faltó rotundidad y peso político en el fiasco del vial de Jove»
«El gobierno se equivocó al no limitar los pisos turísticos en todos los barrios, el problema se ha trasladado a otras zonas de la ciudad»
Olaya Suárez Fernández (Gijón, 1993) cumple un año al frente del grupo de Podemos en el Ayuntamiento. Solo ella resistió en Gijón a la continua ... caída de su partido en votos y representación, pero pese a ello reivindica el poder de su formación en la política municipal.
–¿Le gusta el Gijón que está dibujando el gobierno de Foro y PP?
–No es ni de lejos el Gijón que nosotras hubiéramos diseñado. Hay tres grandes problemas: falta iniciativa y contundencia para luchar contra la contaminación, los alquileres han subido más de un 12% en todos los barrios de la ciudad, y evidentemente el problemas de las grandes infraestructuras. Moriyón en Madrid aceptó la alternativa en superficie del vial de Jove hasta que llegó a Gijón y vio la reacción de los vecinos. Le faltó contundencia y peso político.
–Pero en contaminación, vivienda e infraestructuras los municipios tienen pocas competencias.
–Pero las tiene, y por ello debe posicionarse políticamente. En vivienda se pueden hacer cosas desde Emvisa. Y en contaminación, nosotros, por ejemplo, en febrero presentamos un decálogo de medidas sobre asuntos que sí se pueden hacer.
–Pero estará de acuerdo en que el Ayuntamiento tiene poco margen de maniobra en estos asuntos.
–No son competencias puramente del Ayuntamiento, no. Del equipo de gobierno sí dependen las políticas de movilidad, por ejemplo. El concejal, Pelayo Barcia, desconoce por completo que la base de la movilidad urbana son los peatones. Promociona el uso del coche, y le da igual atentar contra la seguridad de los viandantes.
–¿Cómo solucionaría desde lo municipal el problema de la vivienda? ¿Qué ha hecho o qué no ha hecho el equipo de gobierno?
–Hicieron, por ejemplo, una moratoria para las licencias de pisos de uso turístico que ya dijimos que debería de haberse extendido a toda la ciudad y no solo a Cimavilla, La Arena, Centro y Poniente. El gobierno local se equivocó porque la concesión de licencias en otros barrios ha aumentado de forma considerable, y encima se empeñan en no rectificar. Tienen que reformar el programa de 'Gijón Alquila', que lo tienen en mente pero llevan desde septiembre del año pasado pidiendo tiempo. Hay que limitar al 2% las viviendas de uso turístico en los barrios.
–¿Y a nivel estatal cómo trataría de solucionarlo?
–Hay que generar parque público, prohibir la venta de vivienda a fondos buitre, y limitar la compra de viviendas de personas que no van a vivir en ellas. No puede ser que se utilice la vivienda como un método de especulación y que la profesión de alguien sea ser rentista. La vivienda es un derecho y hay que garantizarlo.
–¿Y por qué un ciudadano no puede ser rentista?
–Puede serlo, pero no podemos permitir que su modelo de vida se base en parasitar a las familias de este país. Las rentas de propietarios más que duplican las rentas de los inquilinos. Los rentistas no son el sector de la población a la que hay que proteger. Si la compra de vivienda la limitas solo a personas que van a vivir en ella, bajaría el precio de la viviendas enormemente.
–¿A usted le gustaba el cascayu y el famoso 'scalextric' del carril bici?
–El Muro fue la batalla de Foro durante el pasado mandato y la campaña. Su posicionamiento de revertir peatonalizaciones es bastante negacionista con la realidad en materia de movilidad del resto de Europa.
–¿Pero le gustaba cómo lo dejó el anterior equipo de gobierno?
–Era provisional. Está claro que había que acometer una reforma para hacerlo definitivo. El Muro pide y pedía una obra para mejorar el espacio peatonal (zonas verdes, parque, vías de emergencia…).
–Y volvieron los toros...
–No podemos decir que nos hayan engañado, pero es una vergüenza que hayan recuperado la tortura animal en pleno 2024. En una sociedad democrática no tiene cabida torturar animales hasta la muerte. Y no es una cuestión de libertad, simplemente tratan de convencernos de que la tortura es cultura.
–¿Cómo vivió la crisis de gobierno con Vox?
–Fue por el FICX, pero podía haber sido por cualquier otra cosa. Los que convivimos con ellos sabíamos que esto iba a suceder. Carmen Moriyón utilizó a Vox para hacerse con la Alcaldía, y ahora sustenta su gobierno sobre un tránsfuga que tiene las mismas ideas de ultraderecha que tenía en mayo de 2023.
–¿Cómo es estar en la oposición con Foro y el PP en el gobierno?
–Ni necesitan hablar con la oposición ni se molestan en hacerlo. Limitan mucho la información que nos dan, y eso nos dificulta conseguir logros, pero aún así hemos conseguido que acepten construir un centro municipal para Nuevo Roces, reabrir el campo de La Calzada Rugby Club, o vallar la zona de perros del 'solarón'.
–¿Cómo imagina Gijón en el año 2027?
–Esperemos que seamos capaces de reconducir al gobierno en todo aquello que no nos está convenciendo. Así como valoramos 'Naval Azul', queremos reconducir las políticas de Movilidad y Vivienda.
–¿Tiene la agrupación socialista de Gijón fuerza para liderar una posible vuelta de la izquierda al poder en 2027?
–El PSOE tiene un duro trabajo por delante para recuperar la confianza de la gente de esta ciudad. Pero que les quede claro que si deciden hacer oposición a la oposición o aferrarse al no por el no, otros partidos estaremos dispuestos a tratar de ganarnos el liderazgo de la izquierda.
–¿Y a Podemos lo ve en 2027? La caída en representación y votos es continua.
–Seguiremos dando la batalla. De aquí a las próximas elecciones se tiene que configurar un espacio político fuerte y unido a la izquierda del PSOE.
–Espacio fuerte y unido. ¿El futuro de Podemos en Gijón pasa por concurrir en las municipales con IU-Más País-Sumar-IAS?
–¿Estaba en cuestión la supervivencia de Izquierda Unida en 2016 cuando en el Congreso de los Diputados tenía solo dos escaños? ¿Necesitaban a Podemos para sobrevivir? En Gijón hay una militancia fuerte que es capaz de mantenerse viva por si misma.
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