«Puedo leer otra cosa pero no me engancha como la fantasía»

El escritor Omar Fernández García-Jove (Sotrondio, 1976) presenta hoy en la Antigua Escuela de Comercio su última novela de fantasía 'La Oscuridad de Ósgadur', esperada secuela de 'Salgadum'.

-Con 'Salgadum' tardó diez años, la secuela ha llegado rápido...

-El otro era como un hobby, no piensas que va a salir publicado y no le das tantas vueltas. Entonces a raíz de que gustara pues ya te centras más en hacerlo, este me llevó dos años.

-Entonces vino solo el continuar con la historia.

-Sí claro, a raíz de que el primero fue bien; se sentaron las bases. En la trama inicial tienes que contar por qué pasa tal cosa, situar a los personajes, pero en el segundo la acción ya aparece desde la primera página. Es un lenguaje sencillo que engancha.

-Su mundo de fantasía, ¿cómo surgió?

-Siempre me ha gustado la literatura fantástica, es lo único que leo: Tolkien, Laura Gallego, Javier Negrete, cosas así, es la única literatura que disfruto. Puedo leer otra cosa pero no me engancha tanto, entonces ahora mismo vivo en Salgadum, pensando cómo va a ser el tercero.

-Hábleme de la nueva aventura de Joel y la princesa Turnimai.

-Da un vuelco. En el primero Joel era como el centro, el protagonista, pero Turnimai pasa a ser la líder natural del planeta Salgadum, se pone al frente. El resto de personajes irán a su rimo de ahí que salga en la portada.

-¿Alguno de sus alumnos de secundaria lo ha leído?

-Lo han leído muchos. Los críos lo disfrutan y reconocen la manera de fluir de la historia, que sea un lenguaje coloquial.

-¿Sacó su inspiración de ellos?

-Vivo con adolescentes de 17, 15 y 10 años con lo que inspiración ya tengo bastante en casa (ríe). Mi hija, que es una lectora empedernida, fue la primera que lo leyó, me gusta escuchar sus opiniones. Tengo a mi editora en casa.

-La fantasía atrae mucho público, ¿cómo cree que lo abarca la FeLiX?

-Esto es una feria de libro general así que evidentemente tiene que haber de todo y eso es lo bueno. Cada año hay más casetas, editoriales, eventos, autores... así que la oferta ha crecido mucho.

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