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Subieron las gaitas, la sidra y el bollu a Santa Catalina
Cerro. El Día de Asturias en Gijón se celebró con una jira calurosa. En la rifa del bollu se recaudaron 741 euros para la Cocina Económica
Y la gente por el prado no dejará de bailar, mientras se escuche una gaita o haya sidra en el llagar». Lo canta Víctor Manuel en 'La Romería' y ayer en el cerro de Santa Catalina, que acogió la tradicional jira por el Día de Asturias en Gijón, se reprodujo la estampa tal y como mandan los versos del cantante mierense. No faltó nada: gaitas, sidra, bailes, rifa del bollu y manteles perfectamente presentados para la ocasión. Dio gusto. Prestó.
A las 10.30 horas comenzaron las bandas del Festival Internacional de Gaitas a desfilar por el Muro de San Lorenzo. Los vecinos que se asomaban a las ventanas y los bañistas más madrugadores bailaron al ritmo de las gaitas y los tambores.
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Mejor Presentación en Prau
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1º: Victoria
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2º: Las de Siempre
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3º: Cimavilla en Prau
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Cesta más Prestosa
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1º: Playinos
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2º: La Llambiona
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3º: Cimavilla en cesta
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Sostenibilidad
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1º: Cimavilla en Prau
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2º: Las de Siempre
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3º: Victoria
La comitiva folclórica subió a la atalaya gijonesa a las 13 horas. La rifa del bollu recaudó 742 euros para la Cocina Económica. Ejerció de maestro de la rifa el actor Félix Corcuera, quien volvió a «sacar les perres» al personal. El sol y el calor parece una acompañante seguro de esta celebración, pues año tras año se lleva a lugar con buen tiempo. El calor, ayer, por momentos, sofocante.
El mayor pujante fue el grupo de baile del Grupo Cultura Covadonga, que llegó a los 52 euros para llevarse tres roscas. Y los padres de Carmen Ordiz y Vega Villanueva, dos pequeñas asturianinas, también concursaron para adquirir el bollu. Y, claro, el pan, un manjar siempre bien preciado por los niños, hizo las delicias de nuestras protagonistas, quienes posar posaron para EL COMERCIO, pero no soltaron el bollu.
El premio a la Mejor Presentación en Prau lo ganó Victoria; la Cesta más Prestosa, Los Playinos; y el premio a la Sostenibilidad fue para el grupo Cimavilla en Prau. «Es un día que tenemos marcado siempre en el calendario del verano. Siempre nos lo pasamos estupendamente, tanto los niños como los mayores», comentaban los miembros del grupo 'El Mantelón'.
A la jornada, por cierto, acudieron los concejales Montserrat López Moro, concejala de Cultura, y el presidente de Divertia, Óliver Suárez. «Da gusto ver la participación y el aspecto que presenta el cerro de Santa Catalina. Desde luego, esta jira es un acierto más en la programación del verano», apuntó Suárez desde la carpa de Divertia. Tras la rifa, el bailador Ramón Villa enseñó a los presentes y los guió en el baile de la Danza Prima. Medio centenar de asistentes se sumaron al tradicional baile asturiano. Además, como no podía ser de otra forma, Víctor García, el de Cimavilla, puso el colofón final cantando el siempre aplaudido y deseado por el público 'Gijón del alma'.
Lució Cimavilla su esplendor en el Día de Asturias en Gijón. «Barrio marinero tiene un sabor a salitre y a sidra», cantó también Víctor, cantante siempre aclamado.
Juegos asturianos por la tarde
Terminada la comida campestre, los vecinos organizaron para los más pequeños una escuela de juegos tradicionales asturianos. Aros, zancos, carrera de tortugas, pesza la botella, tiro al palo, la rana, la llave, tiro de cuerda, carrera de lecheras... La oferta fue amplia para el disfrute de los más pequeños.
