Los vecinos de La Camocha, en Gijón, «no pueden más» y se manifiestan «para no tener miedo y vivir en paz»

«No es una cuestión étnica. No somos racistas. Jamás lo hemos sido. No acusamos ni a gitanos ni a payos, pero sí queremos que las personas que no nos dejan vivir cesen en este tipo de actuaciones. No podemos más. Llevamos tres meses que las señoras no se atreven a pasear, los padres no dejan ir solos a los críos y ya de noche ni te cuento... la gente está muy asustada», comentaba Jesús Alonso, mientras seguía recibiendo insultos de varias personas de raza gitana que le acusaban poner la diana sobre unos familiares suyos al haber nombrado que las personas que estaban provocando estos actos perjudiciales, para la buena convivencia del poblado gijonés, viven en un piso de la calle del Río.

«Nos acusáis sin razones. Venga dímelo a la cara. Porque estás hablando de mis primos, de mis sobrinos, de mi familia. No hacéis más que ir a la tele, a los medios, al concejal, no tenéis vergüenza. Esto es discriminación», le gritaba una mujer a Jesús que en tono conciliador, y acompañado de otros vecinos, intentaba calmar la situación.

«Esto va a acabar en tragedia. La crispación se ha trasladado a la calle y ya estáis viendo la situación que hay», clamaba Isabel López, también de la Asociación Vecinal de La Camocha. Dicha situación ya ha sido trasladada el pasado martes al concejal del Partido Popular, Abel Junquera, durante una reunión que mantuvieron para trasladarle varias demandas del poblado y entre las que destacaban las denuncias interpuestas tanto a la Policía Local como a la Guardia Civil por estos actos de agresión y vandalismo.

Los vecinos lo tienen claro: «Queremos una Camocha libre, democrática, pacífica y segura y no tener que soportar como pegan a menores, nos pintan los coches, rompen inmobiliario del barrio, hay robos en viviendas, molestias de ruidos…. Y todo esto desde que hace tres meses se asentaron 10 'personas problemáticas' que nunca habíamos visto por La Camocha, aunque solo es una pareja la que está alquilada, en un piso de la calle del Río. No podemos más. Esto tiene que parar ya. Queremos vivir tranquilos y que en La Camocha se pueda vivir, como siempre se ha hecho, en armonía y apoyándonos unos vecinos a otros».

Desde el C.E.I.P. Jacinto Benavente, su directora, ha remitido un comunicado a lo medios de comunicación haciendo «un llamamiento a la calma y reflecxión para que no afecte ni a las familias ni a los menores en situación vulnerable y que se trata de forma profesional la comunicación sobre la convivencia en nuestro barrio para que no afecte de forma negativa».