El 'Gordo', esquivo con Asturias desde hace ya catorce años

No puede decirse que es por no intentarlo, porque los asturianos nos gastamos una media de 91,10 euros por cabeza en lotería en este sorteo, pero el codiciado 'Gordo', el 86148, el más alto de la historia, volvió a pasar de largo por la región. Y, como una metáfora de quien aguarda una alta velocidad que nunca llega, cuando salió del bombo con destino, fundamentalmente, a la zona del AVE de la madrileña estación de Atocha, Asturias sumó catorce años sin más que pellizcos de suerte.

Ya queda lejos en el recuerdo el orbayu de millones que cayó sobre Nava y Siero y que también alcanzó otros puntos de la región. Los 360 millones de euros que dejó el 06381 en 2007 se desdibujan en la memoria para una de las regiones que más gasta por habitante en el sorteo de lotería más tradicional del año. Y también los diez décimos del 'Gordo' que se quedaron en Avilés en 2013. Incluso los diez boletos del premio más codiciado que se trajo un matrimonio gijonés de Punta Umbría el año pasado para repartir con los amigos. O sea, cuatro sabrosos millones de euros.

Desde aquel venturoso 2007, las alegrías que ha dado en Asturias el sorteo de Navidad de la lotería han sido más bien escasas. Y es que catorce años hace ya de la última gran fiesta lotera. Entonces la fortuna sí que fue generosa. Y mucho.

Aquel 22 de diciembre de 2007 cayeron del cielo 360 millones de euros que supieron a gloria bendita. El 65% del premio que deparó el 06381, un número feo que muchos tienen grabado a fuego, se quedó en Asturias y se repartió a través de papeletas por toda la geografía patria. El resto tomó rumbo a Coruña, Toledo, Madrid, Teruel, Lérida, Barcelona y Almería. Difícil en el pueblo sierense de Molleo olvidar aquel día y el consiguiente fiestón. Su sociedad de festejos repartió en papeletas millones y millones por toda España.

En realidad, la suerte se vendió desde las administraciones de Siero, Nava y Llanes, pero esa magia de la lotería de Navidad hizo que la celebración llegase a muy diferentes puntos del Principado, desde el Zara de Avilés a una bodega del barrio gijonés de Pumarín o la plaza de Abastos de La Felguera.

Aquel día, todos los focos apuntaron a Asturias, como sucedió también en 1998. Entonces, hace 26 años, los agujeros se taparon a montones en Gijón. Cayeron 10.000 millones de pesetas de la mano de la Peña Jiménez y Tino el Roxu.

Aunque dicen las estadísticas que el Principado es, en general, una comunidad con suerte. Según los datos de Loterías y Apuestas del Estado, el 'Gordo' se ha dejado caer en toda la geografía astur. A Gijón, por ejemplo, se le atribuyen seis gordos (tres a Oviedo), aunque el último, el de 2012, fue demasiado discreto: un solo décimo.