Fallece José Luis Galán, presidente honorario de la asociación Asturleonesa del Camino de Santiago
Trabajó hasta su jubilación en la Cristalería Garvés, compatibilizándolo con la difusión de la ruta jacobea que recorrió por todas sus vertientes
José Luis Galán, presidente honorario de la asociación Asturleonesa del Camino de Santiago, falleció este martes en Oviedo a los 84 años. Su corazón dejó de latir en uno de las jornadas más importantes del año para el Albergue de Peregrinos, el día de Santiago, y sus apariciones públicas se habían reducido en los últimos años debido a los problemas de salud que presentaba que hicieron que hace un año dejase de presidir la entidad sustituyéndolo en el cargo Lourdes Campillo. Deja viuda a Dolores Álvarez Noval con quien tuvo tres hijos: Francisco Javier, María y José Luis Galán Álvarez.
Galán nació en 1938 en la calle Santa Susana. Hijo de José y María Luisa, sus padres hicieron una conjunción de sus nombres para su único hijo. Pronto se mudaron a la calle San Antonio y él pasó su infancia correteando por las calles Mon, Santa Ana y la plaza de la Catedral. Por aquel entonces no había peregrinos porque, según recordó él mismo en un reportaje publicado por EL COMERCIO, no se ponía en valor «la importancia que tenía en Oviedo en la ruta a Santiago», y fue a la escuelina de doña Pacita.
Tras pasar por el instituto Alfonso II, comenzó a trabajar en una empresa constructora donde realizaron el edificio anejo a la Universidad, pero recibió la convocatoria de la mili y le tocó en Zaragoza. Pasó por Droguerías e Industrias Reunidas Sociedad Limitada (Dirsa) y se jubiló en la Cristalería Garvés de la calle Rosal.
Todo ello lo compatibilizó, primero, con el Centro Asturiano. Formó parte del equipo de Pedro Pascual durante un mandato. También participó en Quo Vadis hasta que en los noventa se creó la Asociación Astur-Leonesa de Amigos del Camino de Santiago. Fue en la parroquia de San Lázaro de Otero, de la mano de don Celestino, y ya en 1993 consiguieron abrir el primer albergue de peregrinos gracias a un convenio con el Ayuntamiento. De aquella era concejal Rodrigo Grossi, que después fue presidente de la entidad hasta su muerte y ahora su legado continúa en el Seminario Metropolitano.
La capilla ardiente se ha instalado en la sala número 7 del tanatorio El Salvador y su funeral tendrá lugar a la una de la tarde en la Basílica de San Juan el Real.
