La ministra de Transportes, Raquel Sánchez, y los presidentes del Principado y de Castilla y León han participado en el primer viaje de pruebas de ... la variante de Pajares (49,7 km.), desde La Robla hasta Campomanes. Es una actuación obligada para que la Agencia Estatal de Seguridad Ferroviaria admita la entrada en servicio de la línea. El periodo de pruebas se extenderá hasta finales del próximo año y la autorización para el transporte de viajeros y mercancías por la variante de Pajares espera obtenerse en el primer trimestre de 2023. La conexión ferroviaria por debajo de la cordillera Cantábrica se empezó a tramitar en 1997, la primera dovela se puso en 2004, el calado de los túneles fue en 2009 y la apertura de la línea, «si no hay problemas», como dijo la ministra, será diecinueve años más tarde de haberla empezado a construir. El proyecto inicial estaba presupuestado en 1.085 millones de euros, una cantidad que quedó pronto sobrepasada -cuando se calaron los túneles ya iban gastados 2.132 millones- y en la actualidad van consumidos 3.716. La compleja construcción del noveno túnel más largo del mundo no estuvo precedida de estudios hidrogeológicos, dando paso a inundaciones de acuíferos y ríos, y sufrió durante casi todo el periodo de obras deslizamientos de terreno en el talud de la boca norte, que se podían haber previsto porque ya constaban en el estudio geológico de la autopista del Huerna, habiéndose descartado esa ladera para la carretera. Hubo que cambiar planes, suspender contrataciones y luchar denodadamente contra las dificultades sobrevenidas, como lo prueba el hecho de que en el año 2017 se emplearan más del 40% de los recursos presupuestados en indemnizaciones a constructoras. Al final, la variante de Pajares supone un recorte de 34 km. en el recorrido y un ahorro de 45 minutos en el paso de Asturias a la Meseta. Una infraestructura que deja atrás el trazado decimonónico para situarnos en pie de igualdad con el resto de regiones periféricas que tienen líneas de alta velocidad ferroviaria para la comunicación radial en España, aportando confort y rapidez a los viajeros y competitividad a las mercancías. Veinticuatro horas más tarde del viaje de pruebas en la variante de Pajares quedaba suprimida la estructura de 'fondo de saco' en la estación de León, al inaugurarse las vías semisoterradas y el nuevo andén que permitirán una circulación directa con Asturias, sin necesidad de hacer maniobras. Una inversión de 49,2 millones de euros que permite acortar el viaje entre La Meseta y Asturias en otros 25 minutos.
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El Plan de Cercanías, 2017-2025, va a recibir un impulso con la inversión de 262 millones de euros, anunciada por Raquel Sánchez para los próximos meses. Entre las actuaciones más destacadas se encuentran la renovación de la vía en el tramo, Gijón-Laviana, y modernización de las doce subestaciones de la red. La inversión en las redes de cercanías es clave porque en el conjunto de España captan al 89% de los pasajeros que viajan en tren, y en Asturias permitiría hacer más fluida la comunicación en el área central y reducir las emisiones de dióxido de carbono a la atmósfera.
El plan de vías de Gijón está en la agenda de la nueva ministra de Transportes tras la entrevista que tuvo con la alcaldesa. Ana González le presentó el borrador del nuevo convenio ferroviario, que sustituirá al aprobado por el Estado, el Principado y el Ayuntamiento en 2019. En él se recoge la ubicación de la estación intermodal en Moreda, con una inversión inferior a los 400 millones, y la pretensión de eliminar del diseño las torres de 20 plantas que constaban en la ordenación del plan de 2008 (plan Junquera), renunciando a maximizar las plusvalías urbanísticas de la zona. Lo más urgente es que el Ministerio de la Transición Ecológica apruebe el estudio informativo de la estación y la declaración de impacto ambiental. Quedan 20 meses para las elecciones y si no se licita y se adjudican las obras, todo puede volver a la casilla de salida.
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