Vacunar con celeridad

La creciente incidencia del virus daña a sectores como el turismo. Hay que inmunizar a la población para evitar los cierres

Domingo, 4 de abril 2021, 02:34

A lo largo de la semana el número de contagios ha ido en aumento en la región, desde los 111 del lunes hasta los 137 ... del viernes. La incidencia acumulada por 100.000 habitantes en los últimos 14 días (IA 14) se sitúa en los 161 casos, frente a los 154 de España. Sólo las comunidades autónomas de Navarra, Madrid, País Vasco y Cataluña tienen una 'IA 14' más elevada que Asturias. El empeoramiento de la situación sanitaria en la región se desarrolla en un contexto de crecimiento de los infectados en España y de la fuerte incidencia del virus en la mayoría de los países europeos. El consejero de Salud, Pablo Fernández Miranda, manifestó en la Junta General del Principado que estamos ante «la inminente llegada de la cuarta ola», un pronóstico al que apunta la actual tendencia, que podría consolidarse si el incremento de las relaciones sociales en la Semana Santa tuviese como resultado la aparición de un mayor número de casos positivos. Quizás la situación de los concejos de Siero y Langreo, actualmente perimetrados y en nivel de máxima alerta, sea un anticipo de futuras decisiones.

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Las medidas restrictivas tomadas por el Principado para hacer frente al crecimiento de contagios han provocado inevitables tensiones. La Plataforma SOS Turismo Rural Asturias ha recurrido ante el Tribunal Superior de Justicia de Asturias el decreto del Gobierno regional que impide abrir las puertas al turismo en las vacaciones de Semana Santa. El hecho de que no se permita el turismo interior, respetando el cierre perimetral de la región, ha sido el hecho decisivo para impugnar las medidas ante la Justicia. El éxito de los establecimientos rurales en Madrid, País Vasco o Cataluña, con un alto porcentaje de reservas comprometido desde fechas anteriores a la Semana Santa, ha hecho que fuera más difícil asumir el cierre de esos establecimientos en la región. El último informe del Instituto Nacional de Estadística refleja una situación desesperada para el sector turístico, al perder en los meses de enero y febrero un volumen de 2.500 turistas cada día, y al desaparecer el 72,8% de los puestos de trabajo: de los 3.717 empleos que había el pasado año sólo se mantienen 1.013 en la actualidad. El turismo rural pasó de las 39.000 reservas a quedar por debajo delas 3.900. Otros dos asuntos han irritado al sector turístico. En las webs especializadas en estancias vacacionales hay más de 300 ofertas de alojamiento. Son reclamos que incumplen el decreto del Principado, ya que ninguno de ellos está entre los 200 establecimientos catalogados como esenciales para posibilitar estancias forzadas -motivos laborales, de salud o trámites judiciales-. Junto a ello está el boom de las autocaravanas, que en las actuales circunstancias sanitarias son vistas con recelo desde los alojamientos turísticos que se mantienen cerrados pese a haber tomado medidas sanitarias.

Junto a las recomendaciones estándar en la pandemia -uso de mascarilla, reducir número contactos personales, mantener la distancia de seguridad-, la prioridad del momento son las vacunas. La llegada de nuevos suministros ha hecho que la campaña de vacunación haya tomado un nuevo impulso. El miércoles se volvió a batir el récord de vacunaciones en un día, con la aplicación 8.631 dosis. Cerca del 15% de la población asturiana recibió ya una dosis y hay casi un 10% de personas inmunizadas. El lado menos optimista viene representado por el retraso de la población octogenaria y nonagenaria que todavía no ha completado la pauta de vacunación. La próxima semana empezará la vacunación a la población comprendida entre los 70 y 79 años, así como los enfermos crónicos (cáncer, VIH, trasplantes, síndrome Down); a partir del 19 de abril se podrá contar con la vacuna Janssen, para los mayores de 66 años. Pese a los retrasos, si las empresas farmacéuticas cumplen los acuerdos alcanzados con la Comisión Europea, en los próximos cuatro o cinco meses puede darse un paso definitivo frente al virus. La polémica sobre el uso de la mascarilla en las playas no debería despistarnos del gran objetivo.

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