La actividad de los guías turísticos se reduce a «servicios esenciales»

Los turistas nacionales han comenzado a llegar a las calles de la ciudad. La buena climatología y los esfuerzos del Ayuntamiento por promover la imagen de Oviedo como destino seguro para los visitantes de otros puntos de la geografía asturiana han comenzado a dar sus frutos. Sin embargo, para el sector de los guías turísticos del municipio la nueva normalidad avanza a paso lento: solo una de las tres empresas que cada verano desvelan los entresijos de Vetusta a los foráneos ha salido a la calle por «servicios esenciales», con un puñado de recorridos por el casco histórico y el Museo de Bellas Artes y grupos reducidos, bajo demanda. Así lo explicó a este diario el responsable de la empresa encargada de las guías, Tyque Turismo Cultural, y vicepresidente de la APIT (Guías de Turismo del Principado de Asturias), David Estévez.

Ofrecen durante todo el mes de julio el paquete 'Oviedo Esencial', con visita a los lugares más emblemáticos del casco viejo y a la Catedral de lunes a sábado, por un precio de veinte euros. Eso sí, «solo salimos con un mínimo de seis personas y hay días en los que no se llena el cupo».

También cuentan con varios itinerarios de visita por el Oviedo gastronómico, con los 'Sabores de Vetusta'; y el literario, por las calles de novela de Clarín o con la lírica de Ángel González. «Es un año atípico», confesó, «las visitas a la Junta, que eran uno de los éxitos de otros años, no comenzarán hasta el otoño y con escolares». Del mismo modo, tampoco estará en funcionamiento el microbús turístico del Naranco que, durante los pasados veranos, ofrecía un paseo por los monumentos del Prerrománico ovetense con facilidades para las personas con movilidad reducida y grupos.

Por su parte, y en colaboración con Tyque, la Asociación de Amigos del Museo de Bellas Artes organiza cada semana varias visitas guiadas a la pinacoteca, a la muestra permanente, y en estos días a la exposición de Orlando Pelayo, 'Exilio y memoria', que se expone en el edificio de la ampliación hasta el próximo 6 de septiembre. Allí, el presidente del colectivo, Alfonso Martínez, manifestó que «es necesario abrir este espléndido espacio tanto a locales como a visitantes, porque a veces no sabemos lo que tenemos». Mientras tanto, y desde la sala, la madrileña Beatriz Menéndez aseguró que la pinacoteca es uno de esos «lugares dorados» de Asturias, y el «lugar ideal para acudir en este desconfinamiento tan extraño».

Además, los guías turísticos juegan con un hándicap en su contra, el de los 'free tours' organizados por guías no acreditados por el Principado, criticó Estévez. «El cliente tiene que concienciarse de que tiene que consumir de una forma responsable, y en el caso de nuestro sector, esto significa acceder a la estructura de profesionales cualificados oficiales y no a los servicios que se ofrecen desde internet y en los que se paga la voluntad», sentenció.

«Son una dura competencia desleal, y en Oviedo los hay y se ofrecen a través de distintos sitios web, la única diferencia con ciudades como Madrid o Barcelona es que aquí no se colocan con un gran paraguas en la plaza principal para captar visitantes», detalló.

En ese sentido, valoró el vicepresidente de APIT, el sector está en horas bajas. En sus palabras, «hay una tendencia bastante fuerte a considerar que el turismo solo es alojamientos y hostelería, pero hay muchos más sectores implicados, y no es cuestión de agravio comparativo, pero nosotros lo estamos pasando peor», lamentó. «Fuimos los primeros en notar a principios de febrero bajada en reservas con las cancelaciones del cliente asiático, por ejemplo. Algo pasaba y algo se movía, y seremos los últimos en salir de esto, no hay ninguna duda», argumentó. «La hostelería, por ejemplo, puede tirar del cliente local, pero nosotros no, dependemos al cien por cien del turismo», concluyó el responsable de Tyque.