Los arqueólogos comienzan a estudiar los restos paleolíticos de La Manjoya

Limitado por el seguimiento arqueológico del propio plan de empleo en el que se encuadran los trabajos, Fanjul circunscribió el estudio a las piezas recuperadas en superficie: un hacha bifaz, raederas y restos de cuarcita para la fabricación de las mismas. «Dentro de la pobreza de piezas que tenemos ahora lo que podemos hacer es un estudio del tallaje y una comparativa de materiales», indicó. Asimismo, como idea a plantear en un futuro cuando finalice el trabajo de seguimiento, Fanjul reiteró lo avanzado en la rueda de prensa de presentación del hallazgo. «Se podría plantear un nuevo proyecto para poder excavar ahí», sostuvo.

Fanjul, doctor en Arqueología por la Universidad Autónoma de Madrid y vinculado a otros trabajos en el municipio como el estudio de la alfarería de Faro, se mostró cauto, sin embargo, con los siguientes pasos a dar en el yacimiento al solo poder disponer de las herramientas que se habían desprendido de la terraza fluvial donde se encuentra el grueso de los restos. «Dependiendo de la financiación y el permiso consecuente se podría plantear ese proyecto», añadió.

Cuando el pasado miércoles Fanjul compareció en la sala de prensa municipal junto con el arquitecto también responsable del seguimiento de los trabajos, Pedro Zapico y los ediles Ana Taboada y Rubén Rosón, este último se mostró favorable a impulsar un proyecto para conocer todo el potencial del yacimiento.

Contactados por este medio, Ignacio Alonso, director del Museo Arqueológico de Asturias, adonde irán las muestras recuperadas tras el fin de los actuales trabajos, indicó que los trámites con la Consejería de Cultura y la Dirección General de Patrimonio «deben de ser rápidos porque el hallazgo es importante en su contexto». Es decir, que cuanta mayor capacidad tengan los estudiosos de relacionar los cantos tallados que Zapico dató en una primera inspección 'circa' 30.000 años atrás, con capas estratigráficas y más restos, mejor se podrá estudiar lo que se planteó como un posible asentamiento neandertal en la zona sur de Oviedo.

En ese sentido, Marco de la Rasilla, también arqueólogo e investigador en la cueva de El Sidrón, disoció la tecnología musteriense encontrada de la cultura neandertal ante la ausencia de restos biológicos.

Fuentes del ejecutivo regional confirmaron que antes de hacer público el hallazgo, el Ayuntamiento notificó el mismo a Patrimonio, tal y como marca la ley, y que han quedado a la espera del informe que elabore Zapico al término del plan de empleo. Según recoge Europa Press, Cultura lo «estudiará y es posible que técnicos del Principado acudan a comprobar el hallazgo».

Ayer, el alcalde de Oviedo, Wenceslao López, se refirió al hallazgo afirmando que «cada institución tenemos una función y responsabilidad» descargando en el Principado las responsabilidades «en el ámbito del patrimonio histórico artístico». «Está claro que hay una función a nivel de Principado de Asturias que es a quien le compete investigar, verificar y contrastar. Los especialistas están para eso», agregó.

«Por lo tanto el Ayuntamiento debe hacer su trabajo», explicó en cuanto al seguimiento arqueológico del plan de empleo. «Imaginaos el lío que se montaría si cada ayuntamiento, somos 78 municipios, intentara apoderarse de competencias de ámbito autonómico», expuso. «Dejemos que cada uno haga su trabajo. Nosotros tenemos que facilitar que eso se haga y se cumplan los requisitos mínimos», abundó.