«Me ayudaron a reconstruirme tras la muerte de mi madre, fue una salvación»

Por su parte, Carmen Cotarelo fue beneficiaria del programa en el Hospital Cruz Roja Española, en Gijón, donde su sobrina estuvo en la unidad de paliativos. «Poder acudir a este programa supuso un alivio», aseguró. Su sobrina también recibió ayuda por parte de la Fundación La Caixa. «Ella era una persona nerviosa, aceptaba mal la enfermedad, cuando empezó a tratar con María, su psicóloga, cambió y pudimos disfrutar de ella». Para Carmen Cotarelo, la muerte de su sobrina supuso un grave golpe: «Si cuesta aceptar la muerte de alguien mayor, de una joven...». Pero ella aceptó la situación, la vivió y «después paz». La misma paz que sintió Mónica Berdasco: «Sentí sosiego. Después de pasar depresión, ansiedad..., me quedé en paz», reconoció.

El Programa para la Atención Integral a Personas con Enfermedades Avanzadas de La Caixa cumple 10 años de trayectoria en Asturias, tras haber atendido a 4.888 personas en situación de enfermedad avanzada y a 7.774 familiares. Por este motivo, y en homenaje a los profesionales, expertos, familiares y voluntarios que lo desarrollan y participan en él, ayer la fundación organizó un acto en el Hotel de La Reconquista en el que los participantes compartieron experiencias, aprendizajes y herramientas para afrontar el tramo final de la vida y la etapa del duelo.

Este programa llegó en el año 2009 a Asturias y se enmarca dentro de la Estrategia de Cuidados Paliativos del Sistema Nacional de Salud. Está implementado a través de una red de Equipos de Atención Psicosocial que proporcionan a enfermos y a familiares, «una atención cálida y personalizada que complementa la labor de las unidades de paliativos, tanto en hospitales como en domicilios».

En Asturias actúan en el Hospital Monte Naranco, en el Hospital Cruz Roja Española de Gijón, en el Centro Residencial El Lauredal, en Gijón, y en cinco equipos domiciliarios de cuidados paliativos. El equipo está encabezado por el doctor José Gutiérrez Rodríguez, y está formado por tres psicólogas, una trabajadora social y una enfermera.

El perfil principal es el de pacientes de oncología, de Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica y de insuficiencia renal crónica.