El Ayuntamiento de Oviedo deberá indemizar al figurante lesionado en el Campoamor

El Ayuntamiento de Oviedo, a través de la Fundación Municipal de Cultura (FMC) y Oviedo Filarmonía, deberá indemnizar al figurante lesionado en accidente laboral el pasado 23 de marzo de 2017 durante un ensayo de la zarzuela 'Doña Francisquita'. En la sentencia del juzgado de lo Social número 4 de Oviedo, la jueza, María Teresa Magdalena Anda, falla a favor del trabajador que sufrió severas lesiones en ambos codos cuando se golpeó en la cabeza con una tramoya al salir a escena aupado en unos zancos. La FMC había contratado a los figurantes de la zarzuela sin contar con las mínimas normas de prevención de riesgos laborales para los actores autónomos, al ser la primera vez que lo hacía, equiparando el protocolo que sí que tienen los músicos en nómina a través de Oviedo Filarmonía pero que, a todas luces para la magistrada, no sirven para quien se calzó, aquel día zancos de un metro de altura para acabar defenestrado y herido por un puente de iluminación.

Así, el Ayuntamiento es responsable del accidente laboral sufrido por el figurante, según detalla la jueza que ordena indemnizarlo con 47.421,50 euros frente a las pretensiones del actor que, de haber estimado por completo su demanda, habría percibido más de 66.000 euros.

En un fallo de 43 páginas, la magistrada recuerda puntualmente que el artículo 14 de la Ley de Prevención de Riesgos Laborales establece en su artículo 14 que los trabajadores tienen derecho a una protección eficaz en materia de seguridad y salud en el trabajo, algo que el Ayuntamiento y sus compañías aseguradoras obviaron a la hora de contratar de manera directa a los figurantes para aquella función cuando, como se venía haciendo hasta aquella fecha, se subcontrataban a través de las diferentes direcciones artísticas que se hacían cargo de las zarzuelas.

Así, mientras, «realizaba sus tareas como figurante. El trabajador, en un descuido, se golpea la cabeza con una barra que sujeta los focos de la sala de ensayos ya que iba mirando al suelo a consecuencia del golpe pierde el equilibrio y se cae al suelo», expone la sentencia.

A partir de ahí, en el proceso de recuperación, necesitó de varias operaciones para restañar las fracturas en los brazos sin recuperar la movilidad completa en sus extremidades.

Con los zancos puestos, el puente de luces en el pasillo de acceso a la sala de ensayo era en casi medio metro inferior a la altura total del número que le tocaba representar.