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El embalse de Los Alfilorios visto desde El Angliru. JOSÉ MANUEL PARDO
El Ayuntamiento de Oviedo estudia asumir la gestión del embalse de Los Alfilorios después de 40 años

El Ayuntamiento de Oviedo estudia asumir la gestión del embalse de Los Alfilorios después de 40 años

Encarga a una consultora especializada un informe sobre el estado de la presa, ante el nuevo requerimiento de la CHC para traspasársela

GONZALO DÍAZ-RUBÍN

OVIEDO.

Martes, 1 de marzo 2022, 01:22

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El que fuera alcalde de Oviedo entre 1979 y 1983, Luis Riera, pasó buena parte de su mandato haciendo antesala en el Ministerio de Obras Públicas. La cubeta del embalse de Los Alfilorios, terminado poco antes, presentaba enormes hundimientos que impedían su entrada en servicio y, con ella, poner fin a las habituales restricciones y cortes de agua que padecía la ciudad a la vuelta de cada verano. Lo consiguió. El ministerio puso el dinero y 'forró' el vaso del pantano. La inauguración del milagro le tocó, sin embargo, a su sucesor, Antonio Masip, que, en 1983, llenó la plaza de la Catedral de surtidores, chorros y luces para celebrar la 'Fiesta del agua' y el fin de los problemas de suministro.

Aquella fue casi la última vez que el Ayuntamiento miró para el embalse. Hasta ahora. Casi 40 años después, el Consistorio ha contratado a una consultora especializada para que analice el estado de la presa, sus necesidades y costes de funcionamiento. No lo hace de forma voluntaria. La Confederación Hidrográfica del Cantábrico le ha remitido un escrito en el que recuerda al Ayuntamiento que le corresponde legalmente hacerse cargo de la presa y en el que le insta a iniciar el proceso para asumir el embalse.

La presa, recuerda el organismo de cuenca, se construyó para y por solicitud del Ayuntamiento al amparo de los Decretos de 17 de mayo de 1940 y 1 de febrero de 1952 sobre el auxilio del Estado a los ayuntamientos en las obras de abastecimiento de agua potable. Es tan municipal como la calle Uría, pero desde hace 40 años el Consistorio ha desoído los llamamientos a asumir la infraestructura.

La explotación de la presa supondría unos 100.000 euros al año

Si el Ayuntamiento no aceptó durante décadas la cesión del embalse de Los Alfilorios fue por miedo. Tras su cierre, la aparición de margas inestables causó importantes hundimientos de la cubeta, los que tuvieron al alcalde Luis Riera pidiendo auxilio a Obras Públicas. Aunque episodios tan importantes no se han repetido, aún en 2005 hubo que hacer un vaciado para impermeabilizar la cubeta. El anterior jefe de servicio de Aguas del Ayuntamiento, Gregorio Abril, no las tenía todas consigo, pero lo cierto es que la presa no ha dado problemas en casi dos décadas. Fuentes de la Confederación Hidrográfica del Cantábrico estiman en apenas 100.000 euros el coste anual de explotación de la infraestructura, una veinteava parte de lo que cuesta a los ovetenses la gestión de la anexa potabilizadora de Cabornio.

Poco dinero, pero la prudencia manda. El Ayuntamiento quiere que una consultora analice el estado de la presa, sus válvulas y aliviaderos para evitar sorpresas, antes de aceptar la cesión del embalse. Cualquier problema que pudiese aparecer tras asumir la gestión, recaería sobre las arcas municipales. Su incorporación al patrimonio municipal tendría algunos efectos sorpendentes. No solo sería el mayor bien por superficie del Ayuntamiento sino también su infraestructura más alta, con los 63 metros de altura de la presa. En realidad, para el Consistorio serían dos pasos, porque desde el mismo muro hasta el grifo de los ovetenses, toda la gestión ya es suya, incluidos los filtros de carbono a pie de presa.

En 2013, el organismo envió el convenio al Ayuntamiento para la entrada en servicio de la potabilizadora de Cabornio, la nueva traída y los depósitos nuevos de El Cristo, en los que Confederación invirtió 24, 13 y 11,3 millones de euros respectivamente. El documento incluía, en un anejo, el acta de entrega de la presa y embalse de Los Alfilorios y, a su pie, los espacios para las signaturas de Ramón Álvarez Maqueda, por el organismo de cuenca, y del entonces alcalde, Agustín Iglesias Caunedo. El Ayuntamiento justo dejó sin firmar esa parte, causando tiranteces en el acto de recepción de la planta de tratamiento de agua potable.

La situación es distinta ahora. El Consistorio está dispuesto a asumir el traspaso. Hay gestos. La semana pasada, la concejala de Festejos, Covadonga Díaz, acudió al pantano a una suelta de truchas en calidad de 'propietaria'. El pasado 17 de febrero, el Ayuntamiento contrató a Soluciones North Line un «análisis técnico y jurídico para la entrega de la presa de Los Alfilorios por parte de la CHC».

Cuando se acuerden los términos de la cesión, Oviedo asumirá el control de la herramienta fundamental de su sistema de abastecimiento. El canal del Aramo, con captaciones en Quirós, Morcín y Riosa y una traída de 63 kilómetros de longitud y sus excelentes caudales de poco servirían sin el efecto regulador de la presa, ubicada en un cerrado valle de Morcín, en la cubeta que forma el arroyo Barrea y con ocho hectómetros cúbicos de capacidad. El embalse parece un lago alpino de 45 hectáreas y desde hace dos años funciona como un exitoso coto de pesca.

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