«Hay que alejarse del concepto erróneo de masculinidad para prevenir el cáncer de próstata»

Gerardo Albornoz (Oviedo, 1971) es directivo de comunicación interna, pero además es embajador de la Fundación Movember en España y capitán de equipo de Asturias-Movember. Se acerca noviembre y empieza la campaña de dejarse bigote para aumentar la visibilidad sobre el problema del cáncer tanto de próstata como testicular. El próximo 31 de octubre, a las 19 horas, en Circus, tendrá lugar la charla 'Mejorando la cara de la salud masculina', que abre la campaña de la Fundación Movember en Asturias, Contará con el doctor Miguel Hevia, urólogo en el HUCA y responsable del equipo quirúrgico de transplante renal; la doctora en Psicología Susana Al-Halabí y el propio Albornoz.

-¿Qué es Movember?

-Es una fundación sin ánimo de lucro que nació en Australia y ya está implantada en 21 países, entre ellos España, cuyo propósito es concienciar a los hombres sobre la necesidad de prevenir el cáncer de próstata y el testicular y de ayudar en los problemas de salud mental que provocan estas enfermedades, amén de la prevención del suicidio masculino. Nuestra seña de identidad es el bigote que nos dejamos crecer en noviembre.

-El problema del cáncer, siempre latente

-De media, los hombres vivimos 6 años menos que las mujeres y ante esta crisis de salud desde la Fundación Movember queremos ayudar a disminuir esa importante brecha. Intentamos que los hombres puedan hablar de sus dolencias y socializar la situación para que se pueda prevenir mejor la enfermedad y que nuestros hijos lo vean como algo más natural. Destacamos la prevención, ya que hay que hacerse pruebas a partir de los 50 años para el cáncer de próstata y de los 45 si eres de raza afro-caribeña o tienes antecedentes en la familia.

-Y también el problema de los suicidios en los hombres cuya incidencia es alta.

-Tres de cada cuatro suicidios en el mundo son de hombres. De hecho, al día hay 11 personas que se suicidan en España. Ante esto, la Fundación quiere poner mucho foco en la salud mental porque los problemas de cáncer de próstata y testicular ocasionan muchos problemas mentales en los hombres ya que hemos sido educados en un concepto erróneo de la masculinidad y la disfunción eréctil o la incontinencia urinaria y otras cosas ocasionan muchos problemas mentales.

-¿Participa mucho Asturias? ¿Es solidaria?

-Desde 2019 trabajamos en el proyecto IronMan, que nos permite recoger un banco de datos clínicos de más de 5.000 hombres a nivel mundial para el estudio del cáncer de próstata. En este estudio participa muy activamente el HUCA, a través del oncólogo Emilio Esteban, que hace un enorme trabajo.

-¿Po r qué se dejan crecer el bigote en el mes de noviembre?

-Todo empezó en Australia con Travis Garone y Luke Slattery que en 2003 se juntaron con unos amigos para tomarse unas cervezas y hablaron sobre que el bigote había desaparecido de las caras de los hombres. A la tercera cerveza habían convencido a 30 amigos para dejarse el bigote como una apuesta y de ahí salió donar el dinero para el estudio del cáncer de próstata. Le pusieron precio al bigote y entregaron un cheque de 45.000 dólares australianos para la lucha contra el cáncer de próstata. Desde ahí se crea la fundación y ya somos más de seis millones de personas las que participamos.

-Llega noviembre, ¿Se va a dejar bigote?

-Sí, claro. Es fundamental para hacer visible el objeto de la Fundación.

-¿Y cuánto vale su bigote?

-Ya veremos. Lo importante es concienciar a los hombres de la necesidad de prevenir el cáncer de próstata y testicular.