Borrar
La Cámara Santa y sus tesoros
E S P E C I A L

La Cámara Santa y sus tesoros

El relicario de Europa. Donde hoy se guarda la Cruz de la Victoria fue la capilla del palacio de Alfonso II

rafael suaréz- muñiz

Miércoles, 13 de octubre 2021, 10:23

Con anterioridad a su consagración como tesoro relicario (siglos XI-XII), la Cámara Santa era la capilla del palacio que ordenó construir Alfonso II, el Casto, contiguo a la basílica de San Salvador en el siglo IX. Se divide en dos niveles: capilla de San Miguel (superior) y capilla de Santa Leocadia. La de Santa Leocadia se destinó a ser el panteón episcopal (hay sepulcros de altos cargos eclesiásticos), mientras que la capilla de San Miguel se consolidó como el corazón del peregrinaje español al custodiarse allí las reliquias traídas desde Toledo con motivo de la conquista musulmana en el 711. La 'Crónica Silense' asegura que procedían de Jerusalén y que antes de fundarse Oviedo estuvieron escondidas en el Monsacro.

Scroll Story imagen 0

Caja de Ágatas

Donada por el hijo de Alfonso III, el infante Fruela, en el año 910. Está construida en madera de ciprés, pesa unos 7,5 kilos y tiene 99 ágatas incrustadas y otras 120 en la tapa

AUX STEP FOR JS

La Caja de las Ágatas

La manufactura de este estuche es una de las principales atracciones artísticas y simbólicas por su alto grado de codificación. Fue donada por el hijo de Alfonso III, el infante Fruela, en el año 910. Es un contenedor rectangular de casi 7,5 kilos con tapa piramidal truncada, realizado en madera de ciprés. Su carga simbólica se basa en referentes bíblicos como el Arca de Noé o el templo de Salomón (hechos con ciprés). Está incrustada con 99 ágatas. 99 es 'amén' en el alfabeto griego. La tapa presenta un conjunto de pedrería de 120 piezas que representan los 120 años de penitencia antes del diluvio universal.

En la placa superior se distribuye simétricamente un programa gemológico a partir de una cruz de cuatro piedras rojas (simbolizan la Pasión de Cristo), un cabujón transparente en el centro que representa a Jesucristo, cuatro piedras azules en las esquinas (representan los ríos del Paraíso) y cuatro perlas (simbolizan los cuatro evangelios). La cara inferior está cubierta por un lámina de plata, sectorizada por una cruz latina gemada en el centro y en los cuadrantes resultantes se colocaron un león, un hombre, un águila y un toro, que son los seres animados mencionados en la visión de Ezequiel.

Scroll Story imagen 0

Santo Sudario

Es una de las joyas principales contenidas dentro del Arca Santa, que mandó abrir e inventariar, en marzo del año 1075, el rey Alfonso VI. Junto al sudario, entre las principales reliquias de Europa con la Sábana Santa de Turín, se guardan numerosas reliquias: desde trozos de la Cruz de Cristo hasta gotas de su sangre y leche de la Virgen María

AUX STEP FOR JS

El Arca Santa

En marzo del año 1075, el rey Alfonso VI mandó hacer un inventario de las reliquias de la Cámara Santa cuando abrió el Arca Santa, que fue cerrada en el año 614 por la invasión persa de Jerusalén. Tras pasar por Alejandría llegó a nuestro país. Contenía 85 reliquias de Jesús, María y el apóstol San Pedro y un trozo de unos 20 centímetros del manto de Jesucristo. La más importante de todas es, sin duda, el Santo Sudario, el paño con el que se cubrió la cara de Cristo tras la crucifixión. Es la segunda reliquia más importante de Europa tras la Sábana Santa.

Está recubierta de láminas de plata nielada, repujada y cincelada; presenta numerosas inscripciones relativas al acta de apertura del arca en el año 1075. Entre los bajorrelieves que la ornan se reproducen distintos pasajes de la vida de Jesús. Atesora trozos de la cruz de Jesucristo, su sangre, un trozo de pan de la última cena, ocho espinas de la corona, piedra del sepulcro, ramas de olivo que Jesucristo portaba a su entrada en Jerusalén y huesos de los profetas. De San Pedro guarda una sandalia del siglo I, una bolsa de cuero, un segmento de cadena de su presidio y hasta maná del que Yahvé hizo llover en el desierto para alimentar a los judíos durante su éxodo de 40 años. Otra arqueta con incrustaciones de coral del siglo XVII guarda las reliquias de la Virgen María: cabello, leche de su pecho, trozos de ropajes, la casulla que le entregó al arzobispo de Toledo e incluso tierra del lugar donde nació.

Scroll Story imagen 0

La Cruz de los Ángeles

La cruz de los Ángeles (arriba)fue entregada por Alfonso II en el año 808

AUX STEP FOR JS

La Cruz de los Ángeles

Fue entregada por Alfonso II en el año 808. Es el trabajo de orfebrería más antiguo que hay en Asturias. Es una cruz griega anicónica casi simétrica en madera de cerezo. Del medallón central penden los cuatro brazos, que le dan a la cruz unas dimensiones próximas al medio metro. Está forrada totalmente con una lámina de oro y moteada por 48 gemas semipreciosas (ágatas, cristal de roca o granates) así como pedrería polícroma. En el extremo de los brazos se hizo un pequeño joyero. De su arte glíptico cabe destacar la técnica de sus camafeos y entalles de origen romano.

Por el anverso, la cruz presenta un camafeo azul en el brazo superior representando a Eneas saliendo de la muralla de Troya y presenta varios entalles reutilizados. En el reverso dispone de un camafeo en el medallón central que muestra el busto del perfil derecho de una joven campesina. En los brazos derecho e izquierdo figuran respectivamente unos camafeos de la diosa Atenea y una cabeza caprina con cuerpo serpentiforme. Por el reverso también dispone de siete entalles.

Scroll Story imagen 0

La Cruz de la Victoria

La cruz de la Victoria por Alfonso III en el año 908. Cuenta la leyenda que Pelayo la portó en Covadonga

AUX STEP FOR JS

La Cruz de la Victoria

Esta joya orfebrística es la protagonista de la bandera del Principado de Asturias. Alfonso III la donó en el año 908. Es una cruz anicónica gemada de extremos trifurcados redondeados, con cuerpo de roble. Está recubierta de una capa de oro con abundancia de piedras preciosas talladas por el anverso y menor trabajo de orfebrería en el reverso, donde se concentran las leyendas en latín sobre la fecha de donación. El valor tan icónico que esta cruz supone para los asturianos es por la leyenda de que Pelayo la portó contra los árabes. El color de las gemas de esta cruz mantiene la misma simbología que la Caja de las Ágatas. El anverso constaba originalmente de 145 piedras, partiendo de la central que representa a Jesucristo, la cual sustituyó a un gran camafeo de un águila en fecha posterior a 1626.

Un turbulento siglo XX

La Cámara Santa no tuvo una vida nada tranquila en el siglo XX. La primera afección se vivió el 11 de octubre de 1934, cuando los revolucionarios se adentraron en la Catedral y dinamitaron la capilla de Santa Leocadia. ¿Qué fue lo siguiente? Pretender comenzar las obras de restauración de la capilla y de las reliquias y que estallase la Guerra Civil en julio de 1936. De nuevo la Catedral quedó severamente dañada. Bombardeos, voladuras y cientos de cañonazos hicieron diana en ella. No fue hasta el 6 de septiembre de 1942 cuando la Cámara Santa volvió a consagrarse tras su reconstrucción y restauración relicaria. Ya en la madrugada del 9 al 10 de agosto de 1977, José Domínguez, un caco de poca monta, la expolió tras colarse en una catedral sin vigilancia. Fue detenido en Oporto el 13 de septiembre. Se llevó la Cruz de los Ángeles, arrancó todas las piedras preciosas posibles de la Caja de las Ágatas y de la Cruz de la Victoria y llevó a cabo todo tipo de destrozos. Finalmente se recuperaron la mayoría de las piezas.

Publicidad

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

elcomercio La Cámara Santa y sus tesoros