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El fuego arrasó con el 58 de Uría, donde falleció Eloy Palacio. M. R.
El Consistorio rechaza indemnizar a los afectados por el incendio de Uría

El Consistorio rechaza indemnizar a los afectados por el incendio de Uría

Sostiene que la adopción de restricciones en la calle tras el fuego era una medida obligada para proteger vidas y bienes y garantizar la seguridad

G. D. -R.

OVIEDO.

Viernes, 13 de septiembre 2019, 01:27

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El incendio de Uría, 58, el 7 de abril de 2016, arruinó dos edificios -el del origen del fuego y el número 25 de la calle Melquíades Álvarez-, causó la muerte del bombero Eloy Palacio y dejó una sombra de duda sobre la actuación municipal aún sin resolver, como lo está la revisión de las bocas de incendio de la ciudad tres años largos después. Dejó también un reguero de afectados, de negocios que perdieron ventas por el corte de la calle o de despachos profesionales y empresas que tuvieron que cerrar, trasladarse temporalmente o hacer una mudanza definitiva.

Parte de ellos solicitaron compensaciones en vía administrativa ante el Ayuntamiento por los gastos ocasionados y por el lucro cesante; sin embargo la larga batalla judicial emprendida por la familia de Palacio en defensa de su actuación durante el siniestro, demoró las reclamaciones judiciales. El Ayuntamiento se opone a todas y ayer defendió en el juzgado, ante las de un despacho de abogados y varios comercios, que el cierre de ambas vías fue una medida obligada para garantizar la seguridad y proteger vidas y bienes y que parte de los reclamantes han visto satisfechos sus derechos por sus pólizas particulares de seguro.

El Ayuntamiento ordenó cerrar Uría y Melquíades Álvarez durante el incendio, pero también en las jornadas posteriores por cuestiones de seguridad. La segunda calle permaneció once días con el acceso prohibido para peatones y vehículos, hasta 18 de abril. Uría tardó aún otras dos semanas en recobrar la normalidad.

Los afectados mostraron su malestar entonces sin éxito. Sin embargo, el Ayuntamiento sí abrió la calle Uría por unas horas entre Independencia y Toreno para permitir el paso de la Vuelta Ciclista a Asturias. Lo justificó entonces por la petición de la Unión Ciclista Internacional acerca de los problemas de seguridad para los ciclistas que representaba el recorrido previsto por Doctor Casal.

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