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El momento en el que los operarios subieron la cruz. A. PIÑA
Una cruz de siete metros para la iglesia de La Tenderina

Una cruz de siete metros para la iglesia de La Tenderina

Diez operarios instalaron la estructura, de hierro galvanizado y 1.500 kilos, en lo alto de la nueva torre del templo, que abrirá sus puertas el 1 de diciembre

A. ARCE

OVIEDO.

Miércoles, 31 de julio 2019, 01:35

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Una «pequeña Torre Eiffiel». La nueva cruz de la iglesia parroquial de San Francisco Javier de La Tenderina mide 7 metros de alto por 2,60 de ancho, pesa 1.500 kilos, está construida en hierro galvanizado y será capaz de resistir el envite de los elementos desde lo alto de la torre de la parte nueva del templo, todavía en obras. El párroco, Alberto Reigada, asistió a primera hora de la mañana de ayer a lo que él mismo denominó como «un momento para la historia del barrio», la instalación de la enorme estructura férrea de color blanco en el tejado del nuevo edificio.

En total, hizo falta una decena de operarios de la constructora encargada de los trabajos, la gijonesa Tidea, para elevar, ayudados de una grúa, la cruz desde el camión en el que la transportaban hasta la cima de la torre eclesial. Allí, capitaneados por el jefe de obra, Juan Fierro, anclaron el esqueleto al tejado «con unos grandes tornillos, igual que se hace con las farolas», destacó el encargado de las labores.

Escasos ocho minutos hicieron falta para llevar a cabo la maniobra ascendente que hizo que algunos contuviesen la respiración por unos segundos. «Llevamos mucho tiempo esperando por esto para que se nos caiga ahora», bromeó uno de los presentes, el exvicepresidente de la asociación de vecinos de San Francisco Javier, Primitivo López.

«Después de sesenta años, al fin estamos comenzando a ver las cosas avanzadas. Las paredes interiores ya están picadas y las dos naves unidas, el columbario con capacidad para cuatrocientas urnas funerarias casi está listo, las vidrieras (trasladadas desde el antiguo coro al nuevo) brillan más que nunca y la capacidad de la iglesia se ha incrementado hasta las quinientas personas», manifestó Reigada «emocionado».

Aún queda trabajo por hacer. El próximo 1 de diciembre, con motivo de las fiestas patronales de San Francisco Javier, el arzobispo, Jesús Sanz Montes inaugurará la remodelación del templo, proyectada por el arquitecto Alfonso Toribio. Los operarios de Tidea, ultimarán la fase de acabados y aislamiento térmico de la fachada durante las próximas tres semanas y comenzarán los revestimientos interiores de la nave unificada. Por el momento, el culto sigue trasladado de forma provisional a la casa de la hermandad de los Estudiantes.

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