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ROSALÍA AGUDÍN
OVIEDO.
Sábado, 11 de agosto 2018, 02:42
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Una manada de jabalíes se paseó estos días por la calle Cardenal Arce Ochotorena de San Lázaro. Dos de ellos son adultos y los cuatro restantes, crías. En su periplo consiguieron comer gracias al pan con el que les cebó un vecino, según denunciaron ayer otros residentes del barrio.
Esta actitud no es la adecuada cuando una persona se encuentra a un suido, tal y como alertan los representantes de las administraciones públicas. Indican que no se les debe de dar de comer y piden que se mantenga una distancia de seguridad. Al fin y al cabo son animales agresivos.
En San Lázaro estas advertencias aún no son cumplidas, ya que en abril otra persona dio de comer a una manada que se paseó por las calles de este barrio a media tarde. Los suidos no solo bajan del monte para buscar alimento. También destrozan las zonas verdes. En la calle de la Bolgachina, a la entrada del parque de Invierno, existen varios desperfectos.
Por otro lado, la Consejería de Medio Ambiente realiza cada cierto tiempo batidas para evitar que estos animales paseen por la ciudad. El año pasado mataron a 37, cinco menos que en 2016, según informaron recientemente fuentes regionales.
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