Las medidas para prohibir los coches contaminantes en el centro de Oviedo costarán 4,8 millones y durarán 15 meses

Los tiempos para su ejecución son ajustados. La orden ministerial es clara: en marzo debía de haberse adjudicado este contrato para después ejecutar unas largas obras para instaurar una Zona de Bajas Emisiones que se dividirá en dos anillos.

El interior alberga la zona más comercial y turística del centro de la capital, abarcando gran parte de las calles con prioridad peatonal del Oviedo Antiguo y alcanza los 0,597 kilómetros cuadrados. Es allí donde se quiere crear lo que el alcalde, Alfredo Canteli, denomina «la gran plaza de Oviedo» permitiendo la unión de La Escandalera con el paseo de los Álamos. Los accesos al aparcamiento, por su parte, se alejarán ubicándose en la calle Marqués de Santa Cruz y la plaza del Carbayón, y esta última junto a Cabo Noval ejercerán de límite para los coches contaminantes. El segundo anillo, denominado exterior, estará limitado por las rondas y suma un área de 1,82 kilómetros cuadrados.

Este contrato que acaba de ser adjudicado se divide en cuatro actuaciones. La que se lleva el mayor presupuesto, con 2,2 millones, es la primera con la puesta en funcionamiento de las restricciones para evitar el paso de los vehículos contaminantes. Entre los elementos incluidos está la colocación de un centenar de cámaras así como diferentes señales para restringir los accesos de los vehículos contaminantes a los dos anillos así como toda la señalización vertical fija que indique el acceso a la ZBE. De esta forma, los conductores se encontrarán diferentes letreros con el mensaje «Zona de Bajas Emisiones. Entrada prohibida a vehículos de motor, excepto aquellos vehículos que dispongan del distintivo ambiental indicado por la entidad local en la parte inferior de la señal».

No será lo único que incluya en estos 2,2 millones. En los pliegos de contratación se incluye la instalación de una veintena de paneles digitales de mensaje variable –como el instalado a la entrada del parking del Tartiere– junto al desarrollo de una plataforma donde se informe a los conductores dónde hay plazas libres para las zonas azul y verde.

También se dará información sobre los cuatro aparcamientos de concesión –Escandalera, Longoria Carbajal, San Miguel y Llamaquique– y los nueve públicos –Vallobín, Pumarín, Turina, Ciudad Naranco, depósitos del Fresno, Económicos, parque de Invierno y plaza de Castilla–.

La segunda actuación ascenderá a 616.000 euros con la instalación de una estación de control de la calidad del aire en el parque de El Campillín, la creación de una plataforma de gestión de las denuncias con las de nueva creación bajo el paraguas de la Zona de Bajas Emisiones y a las que se sumarán las ya existentes que sancionan el acceso a las calles peatonales, los fotorrojos, los cinemómetros y el sistema de denuncias mediante teléfono móvil de la Policía Local. En este punto también se elaborará un plan de comunicación.

La tercera actuación, dotada de 864.000 euros, servirá para la implantación de un sistema que permita la gestión y optimización de las zonas destinadas a carga y descarga existentes a lo largo de la geografía ovetense que estará dotado de una página web y una app para que los conductores la puedan consultar.

Además, se hará un nuevo sistema de gestión de las plazas de aparcamiento para personas con movilidad reducida, se instalarán pasos de peatones inteligentes, se dará información sobre dónde están los puntos de recarga eléctricos, se continuará instalando semáforos con descontadores del tiempo y habrá nuevos cinemómetros sancionadores. La última actuación abarcará la creación de un centro inteligente de movilidad en el cuartel de la Policía Local de Rubín con 1,2 millones euros de presupuesto.