«Queremos un nombre definitivo para nuestra calle»

La decisión final, no obstante, «no está tomada»; mientras que los vecinos se muestran «hartos que de se cambie el nombre de las calles cada dos por tres», lamentó ayer Miguel Collado, que trabaja como conserje en el edificio número 2 de la calle General Yagüe, que también llevó el nombre de Juan Benito Arguelles.

Su vecina, Ana Álvarez, gerente de la peluquería Llongueras, se muestra más rotunda: «Queremos un nombre definitivo para nuestra calle porque acabamos diciendo que estamos donde la Jefatura de la Policía Nacional».

«Es todo un poco locura porque no sabes si decirle a la gente que esta calle se llama Marcos Peña Royo o Lola Mateos», se queja por su parte José Manuel López, dueño del restaurante Casa El Marmio.

«Estamos en un momento en el que no sabemos qué nombre tenemos en la calle y si hay otro nuevo, ¿lo van a consultar con nosotros?», se preguntó ayer Jorge García, del bar Yoraco, en la calle Yela Utrilla que hace un lustro pasó a llamarse Arquitectos Galán. «Que se quede con el primer nombre, era una catedrático de Latín», pidió Mercedes Moreno-Luque, residente en esta vía.

Una opinión parecida a la de Manuel Álvarez, vecino de Fernández Ladreda (que se denominó con el tripartito Joaquín Costa) porque «así se llamó la calle toda la vida» y se evita un nuevo trastorno para las pequeñas empresas. «Tenemos que cambiar todas las tarjetas de visitas, pagar un sello nuevo, las facturas,... ¿Nos van a dar algo de dinero para poder sufragarlo?», preguntó Rocío Chancuci, del taller de arreglos Carnita, ubicado en Marcos Peña Royo.

Otro de los problemas surge con los repartidores, que «a veces te llaman perdidos» al no contemplar sus navegadores los nombres adecuados de las calles, concluye Salvador Garrida de la Parrilla San Julián de Teatinos.

Las que cambiarán en breve de nombre una vez más serán catorce de las diecisiete calles que también se vieron afectadas por las decisiones judiciales. Solo se mantendrán las plazas del Fresno, La Libertad y la vía Melquíades Cabal.