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CINE

Vicente Aranda y Victoria Abril vuelven a unirse en 'Tirante el Blanco'

Su última película, rodada en inglés, se estrenará en 263 salas el viernes doblada al castellano, catalán y valenciano

EUROPA PRESS | MADRID

Miércoles, 5 de abril 2006, 02:00

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Vicente Aranda se reencuentra siete años después con su musa, la actriz Victoria Abril, en la adaptación de 'Tirante el Blanco', su interpretación particular de la novela de caballerías de Joanot Martorell. Las actrices Leonor Watling, Ingrid Rubio y la joven Esther Nubiola protagonizan también este "complot de damas".

Aranda ha presentado hoy en Madrid su último filme, acompañado de las cuatro actrices. "Vicente no tiene manías, sino virtudes. No ceja hasta que el plano está bien hecho. Es el aragonés de siempre", señaló Abril, destacando que en el rodaje de esta película ha encontrado a Aranda "todavía más inasequible al desaliento". "Tiene una voluntad férrea", subrayó. La actriz destacó que rodar en "inglés arcaico", le ha venido "muy bien" y no ha sido "ningún problema".

En 'Tirante el Blanco', con un presupuesto que sobrepasa los 14 millones de euros, los trajes y los decorados de época han sido realizados para la ocasión. Se trata de una coproducción con Gran Bretaña y el reparto lo completan Caspar Zafer (Tirante), Charlie Cox (Diafebus), Giancarlo Ginannini (Emperador), Jane Asher (Emperatriz), Rafael Amargo (Gran Turco) y Sid Mitchell (Hipólito).

La película cuenta la historia del afamado caballero que recibe el encargo del emperador de Bizancio para que le libere del asedio de los turcos. Pero Aranda se ha centrado más en las intrigas de palacio y ha dado menos cabida a las batallas. "Estoy satisfecho del resultado. He hecho un ejercicio de tesón y he tenido que saltar barreras muy altas", dijo el director, quien ha querido "humanizar" a Tirante mostrándole "más próximo y hasta enamorado".

Tirante es "un iceberg con lava dentro"

Negó que sea un Tirante "blando". "Es un iceberg con lava dentro", apuntó, señalando que se trata de una novela "muy sensual" y que en esta ocasión el sexo no es tan explícito como se cree. "Nos queda mucho para llegar al porno", bromeó. Watling, por su parte, puntualizó que Aranda "hace como ningún otro director las escenas eróticas". "El erotismo, cuando se vincula a un argumento, es una bomba", matizó el director.

Aranda aseguró que con esta película cierra "un tríptico", que completan 'Carmen' y 'Juana la Loca' de películas de época que no piensa seguir. "Tengo el síndrome de Ray Charles: cuando una fórmula tiene éxito, la abandono", afirmó el director, que ya prepara un nuevo proyecto, también en inglés: la adaptación de una novela argentina titulada 'Luna caliente'.

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